La Xunta recibe más de 120 aportaciones para la nueva ley de gestión del ciclo del agua
El gobierno autonómico promete un ahorro de un 10 % para las arcas públicas en la explotación de las depuradoras
La Xunta ha recibido más de 120 aportaciones para la futura ley destinada a la mejora de la gestión del agua en Galicia. Lo ha explicado este miércoles la conselleira de Infraestructuras e Mobilidade, Ethel Vázquez, en la clausura en Santiago de una jornada, precisamente, sobre modelos de gestión del ciclo integral del agua. De todas esas aportaciones, que enviaron un total de 36 entidades durante el periodo abierto de participación pública, el gobierno autonómico estimará total o parcialmente una cuarta parte .
El ejecutivo que preside Alberto Núñez Feijóo impulsa una ley con la que promete un ahorro para las arcas públicas de un 10 % en la gestión de las depuradoras e infraestructuras hidráulicas en general. La clave de la nueva norma, que está en proceso de tramitación, es la gestión conjunta e integral de varias instalaciones de depuración y abastecimiento. Esta agrupación de la gestión de las instalaciones hidráulicas que estén próximas, a criterio del gobierno autonómico, permitirá una mayor eficiencia, optimización de personal y mejores precios de los materiales –al comprarlos en lotes–. Pero también será más factible la contratación especialistas para una gestión más profesionalizada.
Sobre esta futura ley de gestión del ciclo del agua ha pivotado este miércoles la intervención de la conselleira en dicha jornada. Ethel Vázquez ha insistido en que el gobierno autonómico es consciente de que los ayuntamientos, sobre todo los más pequeños, no tienen capacidad económica y técnica para dotarse de las infraestructuras de abastecimiento, saneamiento, depuración y depuración necesarias, ni de mantenerlas de forma adecuada.
Profesionalidad y eficiencia
Según la Xunta, la mitad de las depuradoras gestionadas por los ayuntamientos tienen deficiencias en su funcionamiento, lo que perjudica la calidad de vida de los vecinos, la calidad de las aguas y las actividades económicas como la pesca, la acuicultura, el marisqueo o el turismo. Para aportar soluciones a todas estas carencias, el gobierno autonómico prepara esta ley. Un nuevo modelo de gestión «profesionalizada» de los servicios del agua, pero que, como ha recordado Ethel Vázquez, es voluntario para los ayuntamientos y no excluyente con los modelos ya existentes: la gestión directa, los consorcios o mediante concesionarias.
Se trata, según ha afirmado en las jornadas la conselleira de Infraestructuras e Mobilidade y recogió Europa Press, de «un modelo al servicio de los municipios que así lo deseen» . Todo ello, con el fin de «mejorar la calidad, la eficacia y la eficiencia de los servicios que –los ayuntamientos– prestan a los ciudadanos, ayudándolos en sus competencias».
La Xunta, a través de Aguas de Galicia, gestiona actualmente 28 depuradoras municipales, una opción que con la nueva ley se ofrecerá a todos los ayuntamientos que así lo soliciten, para que puedan integrarse en este nuevo modelo de colaboración en la gestión de los servicios. El modelo de explotación ya la practica la Xunta desde julio de 2015 en las depuradoras de la Illa de Arousa, Meaño y Ribadumia. El gobierno autonómico constató desde entonces un ahorro de un 10,5 % en los costes fijos y de un 7 % en los variables. Esto es, una reducción de costes de 120.000 euros al año frente a una gestión individualizada. La conselleira ha insistido en que el nuevo modelo no implica mayores tasas para los ciudadanos , sino que «reordena las que ya existen».