GALICIA
El monasterio de San Martín Pinario quiere ser Bien de Interés Cultural
Se trata, junto a la Catedral de Santiago, del conjunto arquitectónico de estilo barroco más valioso de Galicia
El monasterio de San Martín Pinari o, uno de los conjuntos barrocos más importantes y valiosos de Galicia -con el único permiso de la Catedral de Santiago- inició ayer su camino para convertirse en Bien de Interés Cultural (BIC) después de que la Xunta activase el procedimiento para declararlo como tal a través del DOG. Así se lo trasladó el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez , al rector del Seminario Mayor de la Archidiócesis compostelana, Carlos Álvarez , en una reunión que ambos mantuvieron para discutir las novedades de preservación y salvaguardia que afectarán a partir de ahora a este monumento arquitectónico.
Ubicado frente a la fachada de la Azabachería de la catedral compostelana, el monasterio de San Martín Pinario conforma uno de los conjuntos monásticos y notables de toda España y se caracteriza por ser el más grande de todo el territorio solo por detrás del de San Lorenzo de El Escorial , en Madrid. El origen del complejo actual se remonta a finales del siglo XVI, si bien su construcción se alargó de manera inesperada durante casi 200 años -no concluyó hasta el 1747- debido a múltiples reformas y reconstrucciones. Fue fundado por un grupo de monjes benedictinos, que poco después del descubrimiento de los restos del Apóstol Santiago, en el siglo IX, se asentaron en un lugar muy próximo a la capilla de la Corticela (hoy integrada dentro de la misma Catedral) llamado Pignario. Allí establecieron un primer cenobio en el siglo XI, siendo a partir del XII cuando vivió una época de auge que lo llevó a convertirse en el más rico y poderoso de Galicia, con cuantiosas rentas en toda la región y unos ingresos abundantes.
Tras una fase de decadencia económica, la agrupación prosperó de nuevo a partir del año 1494, cuando pasó a depender de la congregación benedictina de Valladolid. Esta nueva situación llevó una época de pujanza que posibilitó la reconstrucción de todo el monasterio con el resultado del gran complejo que aún se conserva. Este incluye una fachada de estilo sobrio –a excepción del remate, mucho más barroco–, una iglesia de planta de cruz griega con una sola nave y dos claustros.
El monasterio mantuvo su actividad hasta 1835, momento desde el que las dependencias han pasado a tener diversas utilidades. Con una dimensión de 20.000 metros cuadrados , actualmente alberga la sede del Seminario Mayor, el Instituto Teológico y un establecimiento hostelero. Además, cuenta con biblioteca y un museo con exposición permanente que incluye la iglesia con retablos y la sillería del coro. En ella también se encuentra la Facultad de Trabajo Social y funciona como lugar de encuentros culturales.
Carácter «singular»
Tras la publicación del inicio del procedimiento en el DOG, el monasterio pasó ayer a adoptar el régimen de protección que establece de manera inmediata y provisional – el proceso tiene una duración legal máxima de dos años – la Ley 5/2016 del Patrimonio cultural de Galicia. Además, se abrió también un período de información pública durante el plazo de un mes para que los ciudadanos interesados en el nombramiento puedan examinar el expediente y alegar lo que valoren oportuno.
Durante su intervención posterior al encuentro con el rector, Román Rodríguez destacó el «carácter singular» de San Martín Pinario y explicó se trata de un «conjunto histórico-artístico de enorme magnitud que jugó y juega un papel muy importante en el desarrollo territorial». Además, el conselleiro recordó que esta iniciativa se suma al convenio firmado el pasado julio entre la Xunta y la Archidiócesis para la puesta en valor de San Martín Pinario, que incluirá una dotación de 625.000 euros destinados a la rehabilitación del monumento, la ampliación de la oferta cultural disponible y la mejora de los servicios de atención a turistas y peregrinos.
Para garantizar su protección y reconocer el valor cultural de San Martín Pinario, el Gobierno gallego identificó en el DOG la relación de bienes muebles relacionados con las diferentes etapas históricas del monumento y propuso la clasificación como tal de cerca de 200 elementos . La declaración, explicó el Ejecutivo autónomo, servirá también para señalar los límites para su protección de otros BIC declarados con anterioridad, como la Catedral metropolitana o el Hospital Real y de su capilla.
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