Covid y gripe
Vacunación en Galicia en noviembre: culminar mayores de 80, refuerzo de Janssen y abrir el tramo de 70 a 79 años
Feijóo revela que hay tres casos secuenciados de Delta plus y pide prudencia ante un aumento de casos de coronavirus que aún no preocupa
Acabar de inmunizar, frente a la Covid y la gripe, a los mayores de 80 años, comenzar a dispensar la segunda dosis de Janssen y abordar el grupo de 79 a 70 años. Es el calendario inmediato del Sergas, que pone a funcionar a pleno rendimiento la maquinaria a las puertas de un invierno que elevará la intensidad con la que circulan los virus, al tiempo que en la hostelería, por ejemplo, aumentará el uso de los espacios interiores, con el consiguiente riesgo.
Tras recordar que Galicia es colíder en primeras dosis con Extremadura (94,1%) y líder absoluta en pauta completa (93,2%), y que cualquier persona puede vacunarse sin cita previa, el mandatario gallego, en rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consello, ha detallado que, tras concluir la inoculación de terceras dosis frente al Covid en geriátricos, esta semana se está abordando el grupo de mayores de 80 años, y de forma exitosa: está acudiendo el 97% de citados para el 'pinchazo' extra, y de estos, el 99% solicita además recibir el de la gripe en el otro brazo. El dato hasta el jueves: 40.728 gallegos con las dos vacunas. Para este viernes la previsión era de añadir entre 10.000 y 12.000. El objetivo semanal del Sergas oscila entre los 50.000 y 60.000.
A partir de aquí, el «horizonte» incluye completar el grupo de mayores de 80, en la tercera semana de noviembre, y algo antes, a mediados del próximo mes, comenzar con los refuerzos de Janssen, independientemente de la edad. Esto afecta a unos 122.000 gallegos, que deben recibir una segunda dosis (del suero hasta ahora monodosis). Y, además, comenzar a dispensar la tercera dosis a las personas en el tramo de 79 a 70 años.
Pone toda la carne en el asador el Sergas mientras observa unos datos de incidencia con «síntomas que de momento no son preocupantes, pero sí son síntomas al alza». En los seis últimos días han ido subiendo los casos activos, que han pasado de 413 a 505 este viernes, truncando una buena racha de bajadas casi continuas. Para Feijóo, la muestra clara de que «el virus no desapareció y debemos convivir con él». De ahí su «llamamiento a la prudencia, dentro de que somos la comunidad con los mejores datos de Covid de España».
Como ha desgranado el presidente, la tasa a siete días, aunque ha subido en dos semanas de 7 a 9,6 casos por 100.000 habitantes, es la más baja de España (media: 23,8), y a 14 días es claramente inferior al conjunto de regiones: 17 frente a 49,6. Además, Galicia presenta la menor presión hospitalaria nacional (tres pacientes en UCI, 22 en planta) y la positividad se sitúa en el 1,1%, frente al 2,5% de media en el país.
Pero la Xunta rehúye los triunfalismos y no quiere bajar la guardia. Feijóo ha desvelado que ya se ha detectado en Galicia los tres primeros casos de la variante Delta plus, los tres en La Coruña y en todos los casos de ciudadanos que regresaron del extranjero: dos de Bélgica y el otro de Italia. Ha recordado el presidente que la capacidad contagios es un 12-15% superior y se desconoce la respuesta de las vacunas, por lo que es la variante que «más preocupa en este momento».
Atención primaria
Sin cambiar de ámbito, la Xunta activa un plan de infraestructuras sanitarias de atención primaria para culminar el mapa de los centros de salud, al tiempo que se culmina el de hospitales, un «paso adelante» para «tener un nuevo servicio gallego de salud y, probablemente, un excelente servicio gallego de salud», en palabras de Feijóo, una vez que todo apunta a que la pandemia va quedando atrás.
Precisamente el Covid sometió a un estrés inédito a la atención primaria, sobre la cual ha puesto el foco la oposición que, en la primera oleada, habían absorbido las residencias de mayores. Precisamente, como ha recordado Feijóo, la Xunta ya tiene en marcha la renovación de las residencias de mayores y centros de día, al tiempo que implementa una nueva arquitectura pedagógica en los centros educativos y, en la administración de justicia, también hay un plan de infraestructuras.
En el ámbito sanitario, la idea es acompasar la puesta al día de los hospitales con la actualización de la atención primaria. Desde 2009, en San Caetano se ha dado luz verde a 94 centros de salud, con 120 millones de euros ejecutados. Con el nuevo, se sumarán 37 centros nuevo y 14 que serán ampliados o reformados. En total, 51, que darán servicio a 650.000 usuarios, el 25% de la población gallega.
El plan se articula en tres fases, que siguen criterios tanto técnicos como asistenciales, dando prioridad a cuestiones como antigüedad, estado de conservación de los centros y carencias funcionales u operativas. La fase 0 es la de los centros en estado más avanzado. Ya hay solar salvo en un caso (Moaña) y la tramitación está en marcha. En total, nueve centros nuevos. La fase 1 consta de 21 centros, 14 nuevos y siete a reformar, que se consideran más importantes o más urgentes. Finalmente, la fase 2, que se deja para la segunda mitad de la legislatura, abarca 20 actuaciones, con 14 centros nuevos y seis reformas.
Así, se completaría el mapa de la atención primaria en Galicia. En estos momentos, ha recordado Feijóo, ya se están ejecutando ocho centros, tras entregarse este jueves el de Bouzas, en Vigo. Se están ultimando las reforma de Mugardos y Bertamiráns; se están ejecutando dos grandes centros integrales, en Lalín y Lugo; y antes de final de año está previsto que arranque la ampliación en Porriño y las reformas en Arnoia y Ribadavia.
El objetivo es cuádruple, ha dicho el presidente: saber qué hacer, centrar esfuerzos, trabajar con un horizonte estable e ir negociando con los concellos (cesión de parcelas), teniendo en cuenta que se trata de un «período de tramitación lento».
La Xunta quiere, por último, aprovechar este plan para modernizar los criterios arquitectónicos, de equipamiento, ambientales y de arquitectura institucional del Sergas, absorbiendo los aprendizajes que ha dejado la pandemia, igual que se ha proyectado en el ámbito educativo; y «aportar certezas a la administración local y los pacientes».