El último encarcelado por el crimen de Samuel pertenece a la pandilla del resto de detenidos

A diferencia de los seis primeros detenidos por la muerte de Samuel , cazados pocos días después, la Policía ha demorado casi tres meses en apresar a Alejandro Míguez Roca . Este joven de 25 años, trabajador de una jamonería cercana al estadio coruñés de Riazor, no era, sin embargo, un desconocido para los investigadores. Ya le habían llamado a declarar días después de la paliza grupal que acabó con la vida del joven enfermero.

La tarde del pasado 7 de julio, solo tres días después del crimen, Alejandro Míguez se sentó ante los investigadores , que le habían citado por teléfono para comparecer como testigo. Aquella misma mañana, la Policía había detenido a sus amigos Kaio Amaral y Alejandro Freire, alias 'Yumba'. La tarde anterior habían sido arrestados Diego Montaña, el joven que inició la agresión a Samuel , además de su novia, Kathy. La joven es la única de los cinco que permanece en libertad, aunque con medidas cautelares. El resto, incluido, Alejandro Míguez, detenido el martes, están en prisión por riesgo de fuga. Los otros dos arrestados, por ser menores de edad, permanecen ingresados en un centro de internamiento.

Lo que contó entonces Alejandro a la Policía en esa comparecencia es que la noche del crimen había salido de trabajar de la jamonería sobre las 23 horas. Y s e dirigió al cercano pub El Andén, porque estaban sus amigos, que tenían un reservado . Allí, entre una decena de jóvenes, estaban también Diego, Kathy y 'Yumba' .

Poco antes de las tres, Alejandro se quedó solo en el reservado con otros dos amigos, que no eran ni Diego ni 'Yumba' –fue entonces cuando, según los investigadores, comenzó la agresión en el exterior del local–. El portero les invitó a salir porque era la hora de cerrar. Fue ya fuera, según su declaración de entonces, que oyó a un grupo de jóvenes gritar: «Se está pegando, se está pegando» . Pero, según él, lo único que vio fue cómo dos chicos agarraban a un tercero.

Buscó entonces a sus amigos –siempre según su versión–, pero no los encontró. Luego, ayudó a un amigo a atender a su novia, que estaba borracha. Tanto, que llegó una ambulancia para atenderla. Luego, según él, cogió un taxi con ese amigo para ir al hospital a ver a la novia, y desde el coche vio «un tumulto de unas veinte personas que estaba siendo atendida por una ambulancia» . Fue, supuestamente, tras la segunda agresión a Samuel. Ya en el hospital, según contó Alejandro a la Policía, un empleado de la Cruz Roja le comentó que donde ellos habían estado habían apuñalado hasta la muerte a un joven. Pero Alejandro contestó –según consta en aquella declaración– «que él no había visto ninguna pelea y no sabía nada».

Alejandro sí reconoció a la Policía que luego se vio en el parque de San Diego con varios amigos, entre ellos 'Yumba' y Kaio . Allí, según él, les preguntó qué había pasado, y Kaio le dijo que «Diego tuvo una historia con un chico que le estaba grabando» –una confusión que originó la paliza–, y que 'Yumba' había tirado a ese joven al suelo y le pegó varios puñetazos.

Sobre la seis, Alejandro se fue a casa. Pese a esa versión como testigo, de que ni si quiera vio la paliza, la Policía le sitúa como coautor del crimen . El jueves, cuando lo sentaron ante el juez, Alejandro prefirió acogerse a su derecho a no declarar .