José Luis Jiménez - Pazguato y fino

Rueda, el deseado

Cree que optar a la presidencia provincial de Pontevedra se entendería como un paso atrás

El PP de Pontevedra busca líder. Lo necesita desesperadamente para poner fin al desnorte interno que atraviesa, con el partido en Vigo sumido en una orfandad autodestructiva, en Pontevedra falto de la fuerza necesaria y de capa caída en villas tradicionalmente populares como Lalín, Sanxenxo o Cambados. La generosa —y lógica— salida de Rafael Louzán abre la puerta a una renovación que debe venir con nuevos aires bajo el brazo. Y todos en el partido señalan a la persona mejor indicada para esa tarea: Alfonso Rueda. Sólo hay un pequeño problema. Él parece no querer.

Las fuerzas vivas de la provincia reclaman a Rueda. Es un dirigente incontestable que cerraría cualquier amago de debate interno o veleidad individual de algún osado —véase la pintoresca aventura emprendida por Javier Escribano en La Coruña—. Nadie cuestionaría ese paso adelante del actual número dos del PPdeG, que tendría así un territorio como aval para cualquier eventualidad que se plantee a la vuelta de la esquina. Su hoja de servicios y los resultados obtenidos le avalan, a ojos de sus compañeros. Él sabría resucitar al PP pontevedrés.

Sin embargo, Rueda se resiste. Cree que optar a la presidencia provincial de Pontevedra se entendería como un paso atrás, una capitulación como secretario general, una renuncia a cualquier opción sucesoria sobre Alberto Núñez Feijóo, cuyo futuro es el arcano más preciado de cuantos se ignoran en Galicia. Un error de apreciación porque, incluso aspirando a la plaza pontevedresa, seguiría siendo vicepresidente de la Xunta y, por tanto, el sucesor más lógico en caso de que los acontecimientos se desencadenasen en esa dirección. Y otro elemento más para evaluar: en ningún sitio está escrito que no pueda compatibilizar la secretaría xeral del PPdeG con el liderazgo provincial. Cuiña ya lo hizo entre 1991 y 1999.

La duda de Rueda también es otra. Si Feijóo se va y él está en Pontevedra, ¿cómo optar a la presidencia regional del partido en el congreso extraordinario? ¿Podría ser candidato sin ser el presidente regional? Es un escenario jamás visto en el PPdeG, pero tampoco es habitual el actual sainete que vive la política nacional y que parece condicionar los movimientos a corto plazo de Núñez Feijóo. Es el momento de las excepciones, de las decisiones novedosas que el tiempo puede ir corrigiendo y amoldando según las necesidades.

Si no va Rueda a rescatar al PP de Pontevedra, entonces se abrirán las quinielas con conselleiros y alcaldes de la provincia: Román Rodríguez, María Ramallo, José López Campos, etc. Pero serán componendas de último minuto porque el partido clama por Rueda. Pero, ay, él no quiere. ¿Quién se anima a convencerlo?

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación