Quinteiro ignora el resultado de la consulta y se aferra su cargo entre críticas a la dirección
Tacha de «fracaso» el proceso en el que un 85% de los votantes reclamó su renuncia
En Marea regresa a la casilla de salida tras la consulta a las bases para dirimir el futuro de Paula Quinteiro . Pese a que un 85% de los participantes en el proceso reclamó la renuncia de la parlamentaria —que según un atestado policial se encaró con un agente durante un control nocturno por vandalismo—, este jueves la propia diputada reiteró que hará caso omiso de ese resultado y conservará su acta en la Cámara gallega por «responsabilidad política». No solo eso. Tanto Quinteiro como sus afines —la mayor parte de los miembros del grupo parlamentario, Podemos y un sector de Anova— instan a la dirección rupturista que encabeza Luís Villares a asumir «responsabilidades» por entender que este proceso ha sido, en realidad, un «fracaso» de su gestión. Desde la cúpula del partido instrumental, en cambio, piden que la parlamentaria del sector anticapitalista de Podemos acate la «decisión firme» de las bases y presente su renuncia.
Las discrepancias entre Quinteiro y la dirección de En Marea parten de la lectura diametralmente opuesta que ambos hacen de los resultados de la consulta . La cúpula de la confluencia esgrime que un 85% de los participantes (790 votos) se mostraron partidarios de la dimisión de la diputada, frente al 15% que optó por la opción contraria (138 votos). Sin embargo, los afines a la parlamentaria se aferran a la «baja participación» del proceso, puesto que de los 2.400 inscritos de la confluencia solo 924 (un 40%) participaron en el mismo.
«La Coordinadora de En Marea debería estar muy preocupada, deberían leer este proceso como un fracaso», apuntó Paula Quinteiro en una rueda de prensa. También sus afines, aglutinados en el colectivo «Coidando a Unidade», arremetieron contra la dirección que encabeza Luís Villares a través de un comunicado en el que aseguraron que los datos de la consulta muestran que «dos de cada tres inscritos» rechazaron pedir la dimisión de la diputada. «En estos momentos vemos como la Coordinadora de En Marea no representa al conjunto del espacio. Más del 60% de las inscritas le dieron la espalda en un censo ya de por sí pequeño en comparación con las más de 10.000 inscritas que votaron en las elecciones gallegas de 2016», apuntó este colectivo a través de un comunicado. Durante su comparecencia, Quinteiro sí dio validez, en cambio, al manifiesto que esta semana lanzaron sus afines llamando a no participar en la consulta. Con todo, para suscribir ese texto, que recabó cerca de 800 firmas, no era necesario ni ser inscrito de En Marea ni acreditar documentalmente una identidad.
«Alta participación»
Las viceportavoces de la confluencia Victoria Esteban y Ana Seijas, por el contrario, insistieron este jueves en la validez de la votación y, en contra del criterio de los afines a Quinteiro, defendieron que el proceso contó con una «alta participación». «Las bases le piden su dimisión, ese es el resultado de la consulta, el mensaje es claro», subrayó Seijas en rueda de prensa. Las dirigentes rupturistas se mostraron partidarias de dar «un periodo» a la diputada anticapitalista» para que asuma el resultado de la consulta y «respete» la decisión de las bases. En este sentido, y aunque aclararon que en este momento no valoran la decisión de iniciar un proceso revocatorio contra la diputada, señalaron que, si se niega a dejar su acta, no se descarta la convocatoria del mismo. «Este es el momento en el que estamos, pero no se puede decir lo que pasará mañana», valoró Ana Seijas.
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