ENTREVISTA A XULIO FERREIRO
«El PSOE coruñés tuvo poco que ver con lo que proyectó Sánchez»
El candidato de la Marea Atlántica asegura que el apoyo de Podemos «está claro» venga o no Iglesias a la ciudad

Xulio Ferreiro se alegró el pasado 28-A de la victoria de Pedro Sánchez en las generales. «Hubo una mayoría de progreso clara », subraya el candidato de la Marea Atlántica y aspirante a la reeleción. El magistrado y profesor de Derecho que en 2015 se convirtió en uno de los autodenominados alcaldes del cambio, no pidió entonces el voto por ningún partido tras la fractura que sufrió el rupturismo gallego. Ahora espera que la ciudadanía coruñesa siga apostando por su candidatura .
¿Cree que el efecto de Pedro Sánchez el 28-A beneficiará al PSOE en las municipales?
El PSOE coruñés en su comportamiento en estos cuatro años tuvo muy poco que ver con lo que proyectó Pedro Sánchez. Si se vota en clave local y se tienen en cuenta las características de ese PSOE, que estuvo más cerca del PP que de apoyar al Gobierno municipal, puede haber un comportamiento diferente del voto.
Pablo Iglesias dijo ya en campaña que apoyaría a Sánchez. ¿Hará lo mismo la Marea si gana Inés Rey?
Nosotros nos presentamos para ganar. No me planteo ningún escenario diferente que seguir siendo alcalde y la fuerza más votada en las municipales, si se diese otro escenario habría que estudiarlo en su momento.
¿Qué tal son las relaciones con el BNG de Francisco Jorquera?
Las relaciones personales son buenas. El BNG tuvo un comportamiento diferente al PSOE estos cuatro años. Creo que no siempre estuvo a la altura, pero cada uno toma sus decisiones políticas. A mí no me cabe duda de que la mayoría de progreso liderada por la Marea debe seguir gobernando la ciudad y ahí me sorprendería que el BNG hiciese otra cosa diferente.
En 2015, Pablo Iglesias arropó su candidatura en un mitin en la ciudad. ¿Vendrá esta campaña?
Independientemente de que se aparezca o no se aparezca en actos concretos, lo cierto es que el apoyo de Podemos está claro. Todos tenemos claro que formamos parte del mismo espacio político. En otras ciudades y en otras candidaturas municipales de Galicia no se consiguió esa unidad de las mareas, pero en La Coruña sí.
¿No está preocupado por que la imagen de división del ruputurismo en Galicia le pase factura?
Esperemos que no, evidentemente creo que no fue bueno. Esa unidad que se mostró en 2015 fue difícil de conseguir, pero afortunadamente en La Coruña nos vimos fuera de esas tensiones. Todo el mundo tuvo muy claro que el proyecto municipal de la Marea Atlántica está consolidado y así vamos a seguir. Dado que aquí no hay ningún tipo de división no tiene por qué afectar.
En estos cuatro años, ¿de qué medida se siente más orgulloso?
Si hay que poner una cosa por delante, de las políticas sociales. En el mandato anterior, Coruña se convirtió en la ciudad de Galicia que más invierte en lo Social, en ayudas de emergencia, renta social municipal, becas comedor, rebajas en las escuelas infantiles municipales... También estoy muy orgulloso de la bajada del precio del autobús, de aplicar la Ley de Memoria Histórica o de cumplir el programa electoral en un porcentaje altísimo.
Una de las promesas era la remunicipalización de servicios y acaba el mandato sin lograr la gestión pública de las bibliotecas ¿Por qué no se avanzó más en este tema?
No era una medida de programa electoral, aunque nunca ocultamos nuestra preferencia por una gestión pública de los servicios. Las causas son múltiples. Hubo dos partidos, PP y PSOE, que utilizaron sus asientos en el consejo de administración de la empresa pública Emvsa, para bloquear la gestión de las bibliotecas, una decisión legítima y que además contaba con informes favorables de la Junta de Gobierno local.
PP y PSOE alegaron que había informes técnicos contrarios. Incluso el BNG, partidario de la gestión pública, se abstuvo ante las dudas.
El proceso es complejo; estamos en un terreno en el que no hay jurisprudencia clara y en el que los juristas opinan de manera diferente. Escudarse en informes jurídicos divergentes denota falta de valentía a la hora de apostar por la gestión pública.
Una de las polémicas que ha rodeado su mandato es la investigación judicial en relación al Proyecto Cárcere. ¿Si volviera atrás haría las cosas de otra manera?
Hubo un concurso público, de un proyecto que surge de la ciudadanía. Era un proyecto para darle usos sociales a un espacio abandonado, un edificio que el PP en el Gobierno de España y en el Ayuntamiento coruñés dejaron caer. Cuando un edificio está en ruinas es cada vez más difícil de recuperar para lo público y más justificable privatizarlo, y es un edificio muy goloso para proyectos de carácter especulativo. Eso es lo que hay detrás de todo esto.
La Fiscalía ve prevaricación.
La Fiscalía cogió una denuncia del PP y tras leerla entendió que podían derivarse hechos delictivos y lo pasó al juzgado que lo está investigando. Si es delito hacer un concurso público para otorgar la cesión de un espacio que está en ruinas para una entidad sociocultural para uso público, si eso es delito pues...
El juzgado lo que estudia es si está cesión benefició a gente del ámbito de la Marea.
Las entidades sociales no son del entorno de un partido o de otro. Esto es como si alguien me denuncia por darle dinero a Cáritas porque hay una persona del gobierno que es socia.
¿Tras ver su gestión en los juzgados, cree que el rupturismo no respetó suficientemente la presunicón de inoncencia en otros casos de supuesta corrupción que quedaron en nada?
El tema de la presunción de inocencia siempre lo tuve clarísimo. Aquí hubo concejales de otros partidos llamados a declarar y creo que fui bastante respetuoso. Ahora que se intente poner al mismo nivel el caso de la cesión de un espacio a una entidad sin ánimo de lucro a llevar dinero de todos los españoles a Suiza o a reformar la sede de un PP con dinero B... Me parece que estamos confundidos si equiparamos una cosa con la otra.
Según un estudio de la OCU, los coruñeses perciben más sucia su ciudad. ¿Por qué?
Es un estudio de percepción. A mí lo que me extrañaría es que la percepción siguiese siendo igual después de la campaña brutal que hubo sobre este aspecto. Yo no digo que no pueda tener aspectos que ayuden a que esta campaña cale, como un contrato de limpieza que está acabando y siempre provoca problemas al final de la concesión. Seguramente no había mucho más para lo que hacer campañas duras a este gobierno.