El PSdeG y el BNG se disputan el liderazgo de la alternativa al PP en Galicia
Unos y otros buscan que los ciudadanos los perciban como el partido que debe encabezar el cambio
Pugnan entre ellos para que los gallegos los perciban como la alternativa al PP, pero tanto el PSdeG como el BNG son conscientes de que el uno sin el otro no podrá gobernar Galicia . Ambos consideran que ahora la marcha de Feijóo les abre una oportunidad para alcanzar la Xunta, y, a poder ser, posicionarse como los más fuertes frente a quienes serían, inrremediablemente, sus socios en San Caetano. Este jueves, el día en que Feijóo se despedía en su último Consello, PSdeG y BNG se han afanado en intentar alzarse como los líderes del cambio . Y el próximo martes, en el pleno para la investidura de Rueda, se esforzarán en erigirse como esa alternativa.
En las últimas elecciones autonómicas, las del 2020, el BNG de Ana Pontón dio el 'sorpaso' al PSdeG, que entonces lideraba Gonzalo Caballero –19 escaños frente a 14–. Los socialistas se proponen ahora invertir la situación: el PSdeG es «el partido responsable y de gobierno que está llamado a liderar una alternativa cierta» , valoró ante la prensa el portavoz del PSdeG en el Parlamento gallego, Luis Álvarez. Repitió varias veces que el PSdeG es el partido que «va a liderar la Xunta en las próximas elecciones autonómicas», y, además, el portavoz hizo hincapié en otro mensaje: no solo quieren presentarse como candidatos a liderar el cambio, sino también que les vean como la alternativa «responsable», con «propuestas razonables y ciertas», según recogió Ep.
Al otro lado, el BNG. Los nacionalistas llevan días poniendo énfasis en cuadrar un relato : el de que el cambio político en Galicia no empieza ahora, en el contexto del relevo de Rueda por Feijóo, sino que intentan situar el punto de inflexión, precisamente, en las elecciones autonómicas del 'sorpaso' a los socialistas.
Lo dijo a principios de semana Pontón, y lo ha repetido este jueves ante la prensa la portavoz nacionalista, Olalla Rodil: el BNG enfocará el debate de investidura como «un cambio de ciclo, que no comenzó ahora, sino en las pasadas elecciones , cuando los gallegos situaron al BNG como alternativa de gobierno». Y ellos, como el PSdeG, apelan a esa supuesta sensatez para gobernar y convencer de que encaran el debate desde una «posición de responsabilidad»