Prohibido transitar por los acantilados de As Catedrais bajo multa de 6.000 euros

Quienes visiten la playa de As Catedrais tendrán prohibido, desde esta semana, el paseo por los acantilados de este imponente monumento natural. Así lo resolvió el Gobierno gallego por consejo de los geólogos que estudiaron la zona y que detectaron que este paraje, que contaba con senderos para ver el arenal desde arriba , es especialmente sensible.

Tras la muerte de una joven la pasada Semana Santa por la caída de un piedra en una de las grutas que el mar labró en la piedra, las medidas para blindar la seguridad de los visitantes se han incrementado hasta el punto de que quien se salte esta prohibición podría enfrentarse a una multa de hasta 6.000 euros .

Esta medida se suma a la limitación del número de turistas por día que entró en vigor en 2016 y que restringe a 4.812 personas diarias las visitas durante la Semana Santa y verano. El objetivo es proteger el patrimonio natural de las largas colas que llegaron a copar el arenal en días claves del verano y las vacaciones. Y es que, en los picos de mayor afluencia, la cifra de visitantes podía pasar de los 20.000 para una playa de 1 kilómetro . De ahí que los expertos alertasen de que más allá de los dos o los tres mil visitantes, el impacto podría ser «irreparable».

Además de estas restricciones, en la playa se ha instalado una nueva señalización advirtiendo a los visitantes de los peligros y pidiendo que no se aproximan a los arcos ni entren a la grutas. Fueron las publicaciones en algunos medios especializados de carácter internacional y, posteriormente, en portales de viajes como Tripadvisor las causantes del conocido ya como fenómeno de As Catedrais . Así, de ser un enclave tranquilo que solo era visitado por foráneos y por los venareantes más asiduos a la Mariña, la ancestral Augas Santas pasó a ser un auténtico templo de peregrinaciones.