TRIBUNALES

Piden 50 años a un hombre acusado de violar a su hijo y abusar de los amigos

La defensa arguye que se trata de una «farsa» elaborada por la madre mientras los menores ratificaron en el juicio su versión

El acusado, durante la vista celebrada en la Audiencia de Lugo EFE

J. L. J.

El escrito de acusación de la Fiscalía ya era un relato de los hechos de una crudeza atroz, que concluía con una petición de pena de cincuenta años de cárcel. Pero lo vivido este jueves en la Audiencia Provincial de Lugo lo puso en la voz de los menores, el hijo del acusado y varios de sus amigos. Los testimonios hablan de violación, abusos y exhibicionismo por internet , esta última parte confesada durante la vista por el propio acusado, un vecino de Friol (Lugo) que lleva recluido en la prisión lucense de Bonxe desde que se denunciaron los hechos, en abril de 2016. Su defensa, sin embargo, apela a que todo es «una farsa» orquestada por la exmujer, con la que el supuesto abusador mantenía una mala relación desde su ruptura conyugal.

Cuando este padre dejó presuntamente de serlo , su hijo tenía apenas trece años. Desde 2009, tras la separación de la madre, ambos vivían con los abuelos paternos, que regentaban una tienda de electrodomésticos. Es en este entorno en el que, entre enero de 2014 y marzo de 2016, comienzan los abusos y vejaciones, que van desde tocamientos mutuos, prácticas sexuales no consentidas por el menor e incluso, según reconoció el padre durante el juicio, mostrar sus genitales a través de una webcam a otra menor de edad . Los detalles se evitan para salvaguardar la sensibilidad del lector. El hijo, que hoy tiene 17 años, «presenta como consecuencia de los hechos ansiedad y estrés postraumático», recoge el fiscal. La respuesta del padre en la sala fue que el niño «era conflictivo», que en ocasiones agredió a sus abuelos octogenarios y que él lo ayudaba «a limpiarse» en el baño, negando los actos «de ánimo lúbrico» que se le imputan.

Esta persona extendió supuestamente sus conductas a los amigos de su hijo, recoge el escrito del Ministerio Público. De nuevo, tocamientos, abusos y vejaciones que el acusado intentó acallar amenazando a la víctima «con hablar con sus padres», y a cambio «le daba cantidades de dinero y le hacía recargas en el teléfono móvil» . A un tercer amigo incluso le aterrorizó con «desvelar a sus padres y profesores determinadas circunstancias personales de no acceder a sus pretensiones». Y a otra menor del entorno de su hijo llevó a proponerle «mantener relaciones sexuales a lo que ella se negó», por lo que «la siguió por la calle hasta que la introdujo en un portal tirando de ella» para intentar violarla. La joven consiguió huir.

Todos los hechos no salieron a la luz pública hasta que el hijo del acusado no le confesó a una prima, a mediados de 2015, los actos a los que le obligaba su progenitor en contra de su voluntad.

Denuncia «altamente creíble»

La versión del padre es radicalmente opuesta. Durante la vista, expresó sus sospechas sobre las supuestas relaciones que podía mantener su hijo primogénito con alguno de sus amigos. «Se encerraban en la habitación, quería entrar pero la puerta estaba cerrada. Estaban estudiando, decían, pero desconfiaba que mantuvieran relaciones sexuales entre ellos», llegó a manifestar. Su abogado fue un poco más allá al atribuirle a los menores «antecedentes psiquiátricos, de tipo psicótico» que han construido un relato en el que «existen graves incoherencias y contradicciones en las declaraciones». «Se va a demostrar que esto es una farsa», aseveró.

Los psicólogos y forenses han encontrado grietas en el testimonio del acusado, ya que encontraron el relato del menor y sus amigos «altamente creíbles», y uno de los médicos que lo examinaron admitió que las lesiones reconocidas son compatibles con los abusus denunciados. Según expresaron los peritos durante el juicio, «el padre era un manipulador y el niño era un objeto para él». La psicóloga del Hospital Lucus Augusti de Lugo llegó a reconocer que envió un escrito al servicio de Menores en 2014 recomendando urgentemente «quitar al niño de esa casa enseguida», recoge El Progreso, «ya que eso era un maltrato psicológico, y además el niño tenía carencias de alimentación e higiene».

El juicio quedó este jueves visto para sentencia. La Fiscalía pide más de 50 años de prisión, 15 por cada uno de los tres delitos de abusos, en tanto que la acusación, que representa a la exmujer, solicita 21 años en vez de los quince por cada. Mientras, la defensa mantiene la «inocencia» del procesado, por lo que demanda la libre absolución.

Piden 50 años a un hombre acusado de violar a su hijo y abusar de los amigos

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación