El museo avanza desde la peregrinación como fenómeno universal hasta la propia historia y leyenda del Camino. Bieto Pérez Outeriño, director del museo, explica la sala dedicada a Santiago donde es presentado como apóstol, peregrino y caballero. La característica indumentaria del peregrino de la actualidad se musealiza junto a prendas de siglos anteriores. Comparten espacio obras singulares como este sagrario en madera cubierto de vieiras o un Santiago con sombrero procedente de Alemania. En este óleo sobre tabla italiano del siglo XVI se unen los símbolos de Roma y Santiago como centros de peregrinación de la cristiandad. Maquetas de los diferentes santuarios del Apóstol y restos arqueológicos. Al fondo, un arco del desaparecido claustro medieval de la Catedral compostelana. La exposición permanente ahonda en la configuración de Santiago como meta de peregrinación, con sus gremios, entre los que destacan algunos como los plateros y azabacheros. Vista del Museo de las Peregrinaciones y de Santiago, en la antigua sede del Banco de España en la capital gallega. Aunque se han creado audiovisuales e interactivos ex profeso, el museo conserva también antiguas maquetas. Vista general de una de las salas. La entrada al museo cuesta 2,40 euros, aunque hay descuentos e incluso en varios casos el acceso es gratuito. Una de las últimas piezas adquiridas, realizada este mismo año, a partir de bastones donados por peregrinos de todo el mundo. Los documentos escritos como códices, bulas, mapas reglas de distinas órdenes tienen también una destacada presencia.