Un médico rehabilitador se enfrenta a quince años de cárcel por abusos sexuales a sus pacientes

El próximo martes arranca en la Audiencia Provincial de Pontevedra el juicio contra un médico especialista en rehabilitación por abusar sexualmente de tres de sus pacientes. El facultativo llegó a introducir los dedos en la vagina de una de ellas , que recibía tratamiento por artrosis cervical y epicondilitis del codo derecho. También le tocó el clítoris a otra mujer con una dolencia en las piernas. El Fiscal solicita en total 15 años de cárcel por los delitos de los que le acusa.

Según el escrito del Ministerio Fiscal, el doctor trabajaba como especialista de área del Servicio de Rehabilitación del Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra, integrado en el Servizo Galego de Saúde (Sergas) durante los años 2014 y 2015. Su primera víctima fue una mujer que llegó a consulta para recibir tratamiento por artrosis cervical y epicondilitis del codo. Tras preguntarle por su estado civil y examinarle las áreas en las que tenía las dolencias, «seguidamente, movido por la intención de satisfacer sus deseos sexuales y aprovechando la facilidad que le ofrecía la relación médico-paciente, le indicó que se acostase en la camilla, le subió el vestido, le apartó el tanga y le introdujo dos dedos en el interior de la vagina sin utilizar guantes de exploración», relata la Fiscalía.

Al día siguiente, el 18 de septiembre de 2014, el médico recibió en su consulta del hospital de Montecelo a otra mujer. En este caso la paciente había sido derivada desde el servicio de dermatología por presentar sensación de cansancio en las piernas como consecuencia del tratamiento que estaba siguiendo . «El procesado le indicó entonces que se desnudara y cuando E. se había quitado la ropa y estaba únicamente con su ropa interior le pidió que colocase las manos sobre la camilla, observándola por detrás», explica el Fiscal en su escrito de acusación. A continuación le indicó que se tumbase en la camilla y procedió a examinarle las piernas, después «procedió a separarle el tanga y a tocarle los labios vaginales y el clítoris» . La paciente se levantó nerviosa de la camilla y el médico le indicó que se visitiese y le indicó el tratamiento a seguir.

Su tercera víctima llegó unos meses después, el 19 de enero de 2015. Aunque presentaba dolor en pie izquierdo y trapecios , el procesado le pidió que se quitara la camiseta y el sujetador y emepzó a palparle los pechos. «Aunque esto causó extrañeza a C., pensó que sería una exploración adecuada a su dolencia», explica el Fiscal. La mujer volvió a consulta el día 11 de febrero. El procesado, sin haber realizado una nueva exploración, «le practicó una punción seca en la mama y a continuación, movido igualmente por el deseo de satisfacer sus deseos sexuales y aprovechando la relación médico-paciente, le indicó que pasase a otra dependencia situada fuera de la consulta y allí le aplicó frío en el lugar donde había realizado la punción y posteriormente le realizó un masaje en el pecho derecho », explica la Fiscalía.

Ante el comportamiento del médico rehabilitador, «las tres mujeres se sintieron incómodas» y solicitaron al Sergas el cambio de especialista. Ante estos hechos la Fiscalía decidió presentar la querella. El acusado se enfrenta esta semana a juicio por tres delitos de acoso sexual, con el agravante de abuso de confianza . El Ministerio Fiscal pide en total 15 años de cárcel, cinco años de libertad vigilada a cumplir después de la condena y la inhabilitación como médico durante seis años.