Luis Ojea - La semana
Barra libre y resaca
El PSOE, desde el Consejo de Ministros, arrastrará al conjunto del país al desastre
Al PSOE se le da muy bien prometer que va a crear empleo, pero se le da incluso mejor destruir empleo . Un ejemplo podría ser el de Felipe González en 1982: «prometí 800.000 empleos y destruimos 800.000 empleos», recordaría años después el expresidente. Se acordó de aquello cuando su partido prometió crear un millón de puestos de trabajo en la economía verde tras el estallido de la Gran Recesión. Lo cierto es que José Luis Rodríguez Zapatero dejó la presidencia con 5 millones de parados. Ahora le toca a Pedro Sánchez prometer la creación de 800.000 empleos. Lo más probable es que acabe como el resto de sus predecesores socialistas, provocando una intensa destrucción de empleo.
Al PSOE también se le da muy bien gastar más de lo que ingresa el Estado . González dejó La Moncloa con un déficit del 5,5% y Zapatero se fue con un agujero de más del 9%. El Gobierno de Sánchez y Podemos acabará batiendo cualquier récord anterior. De hecho, esta semana la coalición ha disparado el techo de gasto hasta los 196.000 millones, un 54% más, y ha suspendido las reglas fiscales de estabilidad presupuestaria para este año y el próximo. Lo que no han explicado es cuántas décadas vamos a necesitar para amortizar la deuda generada por su barra libre.
El pensamiento simple de la izquierda actual — más gasto público genera más actividad económica y más empleo — se basa en una falsa inferencia. Los matices son importantes. En muchos manuales de Ciencia Política se pone como ejemplo de correlación espuria el cuento de la cigüeña y los bebés. A parecer la historia deriva de falsa asociación entre los datos de nacimientos de unos y otros en el norte de Europa. Sin embargo, es obvio que no existe ninguna vinculación directa entre ambos fenómenos. El gasto público y la actividad económica sí están relacionados, pero en esa relación influyen muchos factores y no es sencillo calcular a priori el impacto de los multiplicadores fiscales. Incrementar el presupuesto no va a provocar automáticamente que se incremente la actividad económica y se genere empleo.
El problema es que al PSOE se le da muy bien caer en ese tipo de pensamiento simple y desde el Consejo de Ministros arrastrará al conjunto del país al desastre . No, esta no será como otras recesiones. Estamos ante una peligrosa combinación de un shock de oferta y un shock de demanda. Las políticas económicas de las autonomías poco pueden hacer para evitar la catástrofe. Lo más sensato sería al menos no incidir en el error de intensificar la borrachera presupuestaria del Gobierno central porque esta barra libre va a provocar una larga, larguísima, y dura, durísima, resaca.