Tribunales
Juicio por enaltecer a Resistencia: «No admitimos la tesis de que en Galicia existe una banda armada»
Uno de los acusados niega la existencia de una organización con más de 50 atentados a sus espaldas
Quince años de actividad , medio centenar de atentados y siete integrantes condenados están en el haber de la banda armada Resistencia Galega. Una llamada de atención de la Fiscalía en 2010 sobre su actividad —siempre circunscrita a la Comunidad gallega— obligó a que Guardia Civil y Policía creasen grupos específicos con agentes llegados de la lucha armada en el País Vasco. Sin embargo, en un juicio por enaltecimiento del terrorismo celebrado ayer en la Audiencia Nacional, uno de los acusados negó de plano la existencia de esta organización que, aunque no llegó a causar víctimas mortales, sí puso en peligro la vida de cientos de personas con sus atentados. «Él nunca dijo ser miembro, ni en Ceivar admitimos la tesis de que fuera miembro de Resistencia Galega, ni tampoco que existe una organización armada en Galicia llamada Resistencia Galega», indicó ayer ante el tribunal uno de los doce enjuiciados, el histórico Uxío Caamaño. Con «él», Caamaño se refería a un homenaje ofrecido a Antón Santos Pérez , condenado por ser integrante de RG, en el que el ahora acusado participó.
En todo momento, Caamaño —imputado por un delito de integración en organización criminal y de cuatro de enaltecimiento del terrorismo con una petición total de doce años de cárcel— rechazó la relación de Ceivar con Resistencia Galega, sosteniendo que se trata de un grupo dedicado a dar «apoyo moral, social y jurídico» a presos que habrían visto vulnerados sus derechos. Preguntado directamente por Fiscalía si entre los presos a los que Ceivar (grupo al que pertenece) da apoyo hay miembros de Resistencia Galega, el acusado indicó que la organización independentista ofrece su «asesoramiento y solidaridad» a «todas las personas encarceladas por motivos políticos». Acto y seguido, Caamaño — que ya ha pisado la cárcel en varias ocasiones, una de ellas por colocar una bomba en un cajero automático — denunció que «en Galicia existe persecución política a una parte de la población, y muy marcadamente al independentismo».
Durante la sesión de ayer, diez de los doce independentistas gallegos que están siendo juzgados por ensalzar y justificar el ideario de Resistencia Galega se declararon inocentes, negando cualquier violencia en los actos en los que participaron. El análisis de la documentación intervenida por la Guardia Civil durante los operativos de la «Jaro I» y «Jaro II» dejó al descubierto, no obstante, la existencia de un entramado de apoyo a Resistencia Galega cuya misión principal era el enaltecimiento y la justificación del grupo terrorista, derrocado en verano de 2019 tras la detención de sus líderes en una aldea de Fornelos de Montes.
Apoyo explícito del BNG
Representantes del BNG y Anova participaron el pasado fin de semana en una manifestación celebrada en Santiago en apoyo a los doce procesados. Sobre este apoyo explícito, el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, consideró «muy grave» que partidos políticos apoyen manifestaciones que buscan «presionar» o «mismo amenazar» a los tribunales. Ana Pontón, por su parte, se escudó en que el Bloque también rechaza el «uso de la violencia» para denunciar «la utilización de la justicia para criminalizar ideas».