Juan Soto - EL GARABATO DEL TORREÓN
Vigo y la aritmética
Las elecciones fueron el pasado 27 de mayo, seis meses después de la primera megailuminación navideña
En términos de sociología electoral y comportamiento político, en la Fiel, Leal, Valerosa y siempre Benéfica Ciudad de Vigo conviven dos modelos de habitantes: los que entienden de política y los que se toman a guasa las luces de Navidad del alcalde Abel Caballero . En realidad, lo que distingue a unos de otros es la aritmética. Porque resulta que para entender de política (o más bien para entender la política) es imprescindible manejar con cierta soltura tres o cuatro principios de las matemáticas aplicadas y conocer las reglas básicas de la contabilidad. Con eso basta. O sea, lo que se llama contar por los dedos.
Hay que saber, por ejemplo, que, en democracia, las mayorías se imponen a las minorías y, en consecuencia, para acceder a una alcaldía es preciso que el número de concejales a favor sea mayor que el número de concejales en contra. La corporación municipal de Vigo está constituida por 27 concejales , de los cuales veinte integran el grupo socialista, encabezado por Abel Caballero, cuatro el del PP, dos el de En Marea y uno el del BNG, efecto directo del número de votos recibidos por cada una de las candidaturas: la liderada por Abel Caballero obtuvo 101.000, es decir, el 75 por ciento de los emitidos.
Las elecciones fueron el pasado 27 mayo, seis meses después de la primera edición de la megailuminación navideña. Por lo visto, el censo electoral supo distinguir entre gasto e inversión. Echó cuentas y comprobó que el retorno económico derivado del famoso alumbrado superaba con creces el desembolso realizado. Una simple resta de contable de ultramarinos. Quizá por eso, Caballero pasó de los 73.000 votos de 2015 a los más del 100.000 de ahora. Y de los diecisiete concejales de entonces a los veinte actuales. A este ritmo de escalada de unos y descenso de otros, es muy probable que dentro de cuatro años la corporación municipal de Vigo esté constituida por don Abel Caballero y veintiséis concejales de su grupo. Y todo por las dichosas lucecitas .