La instrucción policial atribuye al novio de Nerea Añel su muerte por homicidio doloso tras observar contradicciones

La instrucción policial atribuye a la pareja de la joven Nerea Añel su muerte por homicidio doloso. Actualmente, el acusado se encontraba ingresado en prisión por otros delitos. Fue él quien participó en la reconstrucción de los hechos que se realizó esta misma semana cerca del regato donde, ocho meses después de su desaparición, apareció el cuerpo de Nerea.

Posteriormente, el Juzgado de Instrucción número 3 de Orense, especializado en violencia de género, decretó que se reconstruyesen los hechos para determinar que es lo que había sucedido entre las últimas horas en las que se había visto a la joven con vida, el 15 de enero del pasado año. Todo ello como continuación de la investigación judicial.

El Grupo de Investigación Especializado de la comisaría de Orense constató que estaba acompañada por su pareja sentimental a escasos metros del lugar donde posteriormente apareció el cadáver de Nerea. Tras el estudio de todas las evidencias, el grupo de investigación atribuye a la pareja de la víctima el homicidio doloso de la misma.

Entre otros indicios, los investigadores han destacado que, cuando se presentó la denuncia, declaro haber estado con ella en la zona en la que desapareció. Más tarde, presentó «falsos testimonios ante la policía», según apuntan las investigaciones, informa EP, y «manifestó versiones contradictorias» a familiares y amigos de la víctima «para explicar su ausencia».

Además «fue la última persona que la vio con vida» y «una tarjeta bancaria a su nombre» se encontró entre la ropa de Nerea. El cuerpo, según ha trasladado la comisaría, presentaba fractura de cráneo parieto-occipital como resultado de un posible impacto contra el suelo, acreditando los forenses «la muerte violenta» por la que le atribuyen un homicidio doloso.

Con todo, la jueza ha decretado libertad provisional porque considera que, al encontrarse ya en prisión por otra causa, no existe riesgo de fuga ni «la posibilidad de alterar pruebas o influir en los testigos». Nerea Añel había desaparecido en Orense a mediados de enero del año pasado, su familia la vio por última vez la noche de Reyes, cuando presentó al ahora encausado como su novio.