GALICIA
Los gallegos se gastan entre 40 y 500 euros en crisantemos y rosas blancas
El día de Todos los Santos muchas floristerías de la Comunidad hacen su particular agosto, con pedidos desde hace un mes
![En Outeiro de Rei, Ricardo lleva unas flores a un amigo](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2019/11/01/RICARDO-kNCE--1248x698@abc.jpg)
La tradición por el Día de Todos los Santos se mantiene intocable en Galicia, donde cada cliente que estos días acude a una floristería puede gastarse entre 40 y 500 en flores. Pese a que este regalo para los difuntos tiene una fecha de caducidad muy corta, los gallegos no se resisten a decorar las tumbas de los seres queridos con las flores más típicas y solicitadas. Así, los crisantemos siguen siendo los reyes de la jornada, seguidos muy de cerca por las rosas y las margaritas, cada vez con más seguidores porque «son capaces de aguantar más días» señalan los profesionales del sector. En cuanto a los colores, los blancos siguen siendo los más demandados junto con las tonalidades rojas.
Lo que los clientes de hoy en día buscan son centros y ramos ya rematados, que faciliten la visita al cementerio, y evitar así tener que «montar» en casa la decoración para los nichos y las lápidas, que esta jornada lucen su mejor cara. De ahí que los encargos en las floristerías empezasen a hacerse hace ya un mes, en el caso de los más precavidos. Los que lo dejaron para el último momento, pese a la advertencia de los floristas, debieron enfrentarse a largas colas pese al horario ampliado de la mayoría de estos negocios.
Y como suele ocurrir, la celebración estuvo marcada este viernes por las lluvias generalizadas que descargaron en toda la Comunidad, pero que no impidieron a las familias realizar su ofrenda anual. En los principales cementerios de la Comunidad la entrada y salida de vehículos fue continua, pese a que cada vez más son las personas que optan por realizar la limpieza y llevar las flores el día antes para evitar aglomeraciones. En previsión, la frecuencia de las líneas de autobús con los camposantos urbanos se vio incrementada en ciudades como La Coruña.