Parlamento

Feijóo responsabiliza a Caballero de impedir una solución en Orense con sus «instrucciones»

El presidente de la Xunta asegura que, si se acredita la mala fe de Alcoa, enviará una «petición formal» de intervención al Gobierno

Feijóo, este miércoles durante la sesión de control en el Parlamento gallego DAVID CABEZÓN / XUNTA
Pablo Pazos

Pablo Pazos

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La crisis política abierta en la ciudad de Orense, por la negativa del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, de dimitir, pese a contar con el apoyo de tan solo dos ediles, y haberse roto su pacto con el PP, ha marcado la sesión de control al presidente de la Xunta en O Hórreo. El secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, ha insistido en descargar la culpa en Alberto Núñez Feijóo -«colocó al alcalde, es responsable de la crisis municipal»-, y este le ha trasladado la patata caliente de llegar a una solución al c uestionar que los socialistas orensanos tengan «libertad» frente a sus «instrucciones» , que pasan por vetar al PP.

Feijóo ha asegurado, en calidad de líder de los populares gallegos, que el partido en la ciudad de As Burgas dispone de «libertad para buscar la mejor salida a esta situación», pero se ha preguntado si sucede lo mismo con los socialistas, después de que surgieran voces planteando un Gobierno entre ambos partidos, para desalojar a Jácome, que se topó con Caballero: « Inmediatamente usted lo desautorizó ».

«Si el PSOE piensa en Orense podemos llegar a acuerdos; si solo piensa en el PSOE, va a ser muy difícil », ha advertido Feijóo, quien ha censurado que «el único objetivo del PSOE es conseguir la alcaldía de Orense». Por su parte, «la voluntad de pacto está ahí, en Orense y en toda Galicia», con la única «prioridad» de dar pie a «un Gobierno estable» en el concello. Los populares orensanos tienen «libertad para pactar». « Espero que usted también deje libertad para pactar », ha lanzado a Caballero, la que vetó, por otra parte, cuando se configuraron los consistorios y Diputaciones.

En el careo ha resurgido la negativa de Caballero de aceptar la mano tendida de Feijóo , en el ciclo de elecciones de 2019, para aceptar que gobernara la lista más votada en concellos y Diputaciones, significadamente en Orense, dada la complejidad de su gobernabilidad. Caballero lo vetó y Jácome acabó como alcalde. El líder del PSdeG ha acusado una vez más al presidente de la Xunta de apostar por el «Baltarismo» y el «caciquismo» a costa de colocar como regidor a quien consideraba «letal» para la ciudad y la ha llevado al «caos».

Feijóo ha censurado a Caballero que marcara líneas rojas al PP para desalojarlo de todas las instituciones y ahora no pueda hacerse acreedor de propuestas «honestas y honradas» como las que demanda al resto de partidos. Lo que «más preocupa a la Xunta» en estos momentos, con respecto a Orense, ha precisado, es «sin duda la situación la situación epidemiológica» de la ciudad y el área sanitaria, como prueba que se decidiera este martes confinar tanto la ciudad de As Burgas como Barbadás. « El problema fundamental en la ciudad de Orense en este momento es un problema sanitario ». En lo político, su único «interés», ha defendido, es que los populares orensanos acierten para llegar a una solución; le preocupa la «gobernabilidad», más allá de que el próximo alcalde sea «de un partido u otro partido».

Alcoa

En su careo con Ana Pontón, centrado en el futuro de la planta de Alcoa en San Cibrao, Feijóo ha proclamado que «en caso de que se acredite por la mala fe de Alcoa, que está todavía en plazo para rectificar» su intención de «cerrar la fábrica para eliminar un competidor, el Gobierno de España tendrá la petición formal de la Xunta de intervenir la compañía ».

La líder del BNG ha insistido, de forma reiterada, en arrancar al mandatario autonómico la clarificación de si «están trabajando ya en esa intervención pública [de la planta en A Mariña lucense] o no ». Feijóo ha recordado a la número uno nacionalista que «no se puede intervenir una empresa mientras no se acredita de forma clara que se hicieron todos los procedimientos y todas las cautelas antes de intervenir. No engañe a nadie», ha apostillado.

«No descartamos nada. No descartamos una intervención de la compañía , lo llevamos diciendo hace mucho tiempo, pero hay un procedimiento», ha reiterado Feijóo, en un cuerpo a cuerpo en el que ha vuelto otro clásico a salir a colación: el acuerdo del BNG para investir a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, punto en el que el Bloque ve «obsesionado» al presidente, quien a su vez ha censurado que en La Moncloa «ni lo consideran».

El presidente autonómico también ha querido «reconocer que después de las elecciones autonómicas de julio todo cambió », ha apuntado no sin cierta retranca, «y ahora resulta que el Gobierno de España y la Xunta estamos alineados con el mismo objetivo»: el de dar una salida a los trabajadores de la planta de Alcoa en San Cibrao. «El Gobierno central, desde el mes de julio, está trabajando para buscar una solución y no cerrar la única fábrica de aluminio primario que existe en España. No me duelen prendas en reconocerlo », ha remachado.

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