Debate investidura
Galicia pondrá en marcha este mes test de saliva para detectar nuevos positivos
El candidato a la reelección advierte que el Ejecutivo de Pedro Sánchez «no puede ser un mero observador que se abstiene de actuar ahora» porque «eso no es cogobernanza, sino desgobernanza»
«Esta legislatura es hoy la del coronavirus pero pondré todo de mí para que remate siendo la legislatura del entendimiento y la recuperación»
«El Gobierno tiene que liderar la respuesta a una pandemia que afecta a la nación»

La pandemia y sus efectos han marcado la intervención de Alberto Núñez Feijóo en la primera jornada del debate de investidura, que culminará el jueves con la votación que le elegirá para presidir la Xunta cuatro años más. «La mayoría que los gallegos otorgaron en las urnas no es un mandato exclusivo sino inclusivo», ha expuesto, «solicito el apoyo de esta Cámara para que Galicia avance unida y no dividida; para que el interés general prevalezca siempre sobre los intereses menores; para defender las prioridades de los gallegos, la salud, el empleo, la recuperación económica y el bienestar». «Esta legislatura es hoy la del coronavirus, pero pondré todo de mí para que acabe siendo la legislatura del entendimiento y la recuperación» , ha resaltado, «la legislatura en que Galicia fue quien de volver a superarse».
En el apartado sanitario, Feijóo ha proclamado que la sanidad pública «sigue siendo mi máxima principal vocación y compromiso». Así, ha detallado como en la actualidad «hcemos una media de 4.434 pruebas diarias», «un 170% más que en el pico del estado de alarma», pero que a lo largo del mes de septiembre se pondrá en marcha «un nuevo sistema de test masivos a partir de muestras de saliva» que se está planificando desde Vigo. «Permite que cada persona desde su casa recoja su propia muestra, la registre a través de una app y la remita para que sea evaluada en robot con capacidad para analizar 100.000 pruebas al mes», ha destacado, «es un salto cualitativo para hacer grandes evaluaciones, que lógicamente priorizaremos en las áreas sanitarias y los grandes centros de trabajo o afluencia».
El candidato a la reelección no ha perdido la oportunidad para realizar una dura crítica al papel del Gobierno de España en esta segunda oleada del Covid-19. «España tiene un grave problema si normaliza que solo hay dos alternativas para afrontar la pandemia: o mando único del Gobierno central, o absoluta descoordinación» . El mandatario gallego en funciones ha admitido que las Comunidades «tenemos nuestro papel» pero también exige protagonismo al Ejecutivo de Pedro Sánchez: «Tiene que liderar la respuesta ante una pandemia que afecta a toda la nación».
Pero también ha habido un mensaje claro para la sociedad. «Ningún gobierno podrá combatir el virus sin la colaboración ciudadana». «Si alguien relaja» las medidas de seguridad e higiene «hay consecuencias que pagamos todos», y «tenemos que ser implacables con los comportamientos irresponsables , de los que en Galicia sufrimos algún ejemplo especialmente lamentable». Así, ha indicado que «lo único que nos queda después de la prevención son las restricciones, con todo lo que eso supone», por lo que «si nos relejamos y nos confiamos, retrocedemos y nos confinamos».
Feijóo ha subrayado que «el Estado de las Autonomías es un Estado, no un conjunto de estados», por lo que «la administración central no puede ser una mera observadora que se abstiene de actuar ahora», porque eso «no es cogobernanza, es desgobernanza». «Si no, ¿para qué existen 22 miembros en el Gobierno central?». Así, ha señalado directamente a algunos integrantes del Consejo de Ministros. «¿Para que hay una Vicepresidencia social si nada tiene que ver con las residencias? ¿Para que hay un Ministerio de Educación si no tiene responsabilidad en el curso escolar? ¿Para qué hay un Ministerio de Universidades si nada tiene que decir en la organización de la enseñanza superior?». Pablo Iglesias, Isabel Celaá y Manuel Castells, respectivamente.
Como ya hizo en los últimos días, Feijóo ha puesto el acento en la dificultades de las administraciones para adaptarse a la realidad sanitaria de la pandemia. «Después de todo este tiempo, España sigue exactamente con la misma legislación sanitaria que teníamos antes de la pandemia», algo «incomprensible». En su opinión, «no hay seguridad jurídica» para hacer frente a los brotes «si estamos sujetos al criterio y los tiempos de cada juzgado para tomar decisiones», ni tampoco «si la única alternativa es que vayamos aprobando estadiños de alarma, cada comunidad con un criterio distinto». De ahí lo ya anunciado de que la Xunta remitirá «esta semana» una propuesta de Ley Orgánica de Salud tanto al Gobierno central como a los grupos políticos en las Cortes, «conscientes de que debería tramitarse de modo ágil porque el tiempo en esta crisis es determinante». Galicia, por su parte, reformará su ley autonómica de salud «en este periodo inicial de la legislatura».
El texto de ley orgánica, según ha explicado Núñez Feijóo, se centrará en que las medidas urgentes que se adopten tengan «mayor eficacia» y sean «proporcionadas», que se regulen normativamente «mecanismos que se han demostrado eficaces, como el registro de personas procedentes de otros territorios en diferente situación epidemiológica», actualizar las posibles sanciones y «aclarar las competencias de la administración local y autonómica» en escenarios como el actual. Además, el candidato del PP ha reiterado la necesidad de «eliminar la tasa de reposición» introducida por Cristóbal Montoro durante los gobiernos de Mariano Rajoy.
Inicio de curso
«Quiero que Galicia se sienta segura y tranquila» ante el curso escolar que comienza hoy en las guarderías y a partir del próximo 10 de septiembre en la enseñanza obligatoria, ha proclamado Alberto Núñez Feijóo. «La preocupación cero no se va a alcanzar nunca, pero las familias y el resto de la comunida educativa deben saber que la Xunta está haciendo y hará todo lo que eté en su mano». El presidente en funciones ha pedido «disculpas» porque este inicio de curso se haga «con confusión» por parte de las familias. «Las administraciones pudimos hacerlo mejor», ha reconocido, aunque ha lanzado algunos dardos —también aquí— a las competencias del Gobierno central.
«No me sentí cómodo en esta dilatación de la preparación del curso, ni tampoco observando cómo los socios del Gobierno se pasaban este asunto unos a otros como si fuese una patata caliente de la que nadie quiere responsabilizarse», ha admitido. «La apertura de las aulas me ocupa y me preocupa», y el curso «debe comenzar con las máximas certezas». En esta línea, Feijóo ha adelantado que «la Consellería de Educación organizará encuentros telemáticos con las familias para explicar todas las medidas directamente» . «Los niños precisan una educación de calidad, sus padres no pueden ser sus profesores y los docentes tienen que estar más allá de una pantalla de ordenador», ha insistido, «debemos aspirar a que el curso comience».
Financiación autonómica
El escenario político y económico tiene una incógnita añadida: cómo se podrán elaborar los presupuestos de la Comunidad dado que el Ministerio de Hacienda no ha facilitado ningún tipo de previsión económica para su formulación. «Ni techo de gasto, ni previsiones, ni objetivo de déficit y deuda», ha reprochado Feijóo, «nada». Así, ha recordado que el Gobierno adeuda a Galicia 370 millones de una mensualidad del IVA de 2017 «y por los incentivos por el cumplimiento de los objetivos fiscales», así como otros 100 millones «de fondos finalistas para el empleo que nos confiscaron».
Además, «necesitamos hablar del fondo de 16.000 millones de euros habilitado para afrontar los gastos de este año» porque, en su opinión, «no es suficiente», y la Xunta «está en contra de los criterios fijados discrecionalmente por el Gobierno, que en el caso de Galicia supuso solo en el primer tramo des este fondo 83 millones menos de los que nos debería corresponder». También ha considerado imprescindible «aclarar la situación en la que queda Galicia respecto a los fondos europeos», ya que «el acuerdo alcanzado a nivel europeo por el Gobierno central supondría una pérdida del 40% respecto al anterior periodo comunitario».
«La suficiencia financiera de las comunidades no puede pasar por sistemas de reparto polémicos y poco transparentes , como los que se están aplicando estos meses para el reparto de fondos adicionales», ha advertido, «tampoco por pactos bilaterales que no responden al interés general sino a otros intereses». Por todo ello, Núñez Feijóo ha demandado «una reforma o actualización del sistema de financiación autonómica que ya no puee retrasarse más» y que se realice «pensando más en las personas y menos en los territorios».
Ingreso mínimo y «okupas»
En materia social, el candidato a la reelección ha reclamado nuevamente que la gestión del Ingreso Mínimo Vital se transfiera a la Comunidad, «como le trasladé varias veces al presidente Sánchez». Así, Feijóo ha expresado su «tristeza» al conocer que solo están accediendo a esta prestación «el 0,5% de las personas que lo solicitan». «El grave atasco burocrático que estamos viviendo puede lastrar la eficacia de una medida que el Gobierno anunció como histórica , y que podría serlo si se hubiese puesto en práctica como es debido».
«Ni la mayoría de los gallegos ni yo mismo comprendemos las razones por las que algunas Comunidades —País Vasco y Navarra— ya se les comprometió la gestión de esta ayuda y a otras se nos denegó», si bien ha resaltado que «la parálisis es tal que, cuando se cumplen tres meses de la publicacion del IMV en el BOE, ni siquiera se consumase la encomienda de gestión» a estos dos territorios. Aun en este escenario de agravio, Feijóo ha comprometido que «Galicia diseñará un mecanismo para que una parte» del presupuesto de la renta autonómica de integración (Risga) «se reoriente a complementar» el IMV.
En el apartado de vivienda, además de enunciar algunas de las políticas ya desarrolladas durante las últimas legislaturas, Feijóo ha expuesto que «en ningún caso el derecho constitucional a la vivienda puede ejercerse en colisión con la libertad o a la propiedad de otros gallegos. «Estamos preocupados por la ocupación ilegítima de viviendas» , una situación que «daña la convivencia» y «atenga contra los valores que nos hacen fuertes como sociedad». Dado que el problema se extiende al conjunto de España, Feijóo ha reclamado una reacción «a nivel nacional con rapidez y contundencia».
Estabilidad y moderación
La intervención de Núñez Feijóo, que arrancó a las 9.30 y ha durado unas dos horas en un Parlamento de Galicia donde los 75 diputados portan mascarillas y están separados unos de otros por pantallas de metacrilato, con los invitados trasladados de la tribuna a distintas salas del edificio, ha comenzado con una valoración de los comicios autonómicos del 12 de julio. «La estabilidad y la moderación son los principales vencedores de las elecciones autonómicas que conformaron este Parlamento» , ha aseverado, «la estabilidad que da un Gobierno que no es principiante, sólido y no dividido», y «la moderación que el pueblo gallego preconiza, sinónimo de determinación, respeto y humildad».
Feijóo ha advertido que «la que vivimos no es una crisis más» . «Si la crisis de 2008 fue dura, la que está por venir es durísima», ya que «sus dimensiones son todavía desconocidas». Ante esa coyuntura funesta, el aspirante a la Presidencia ha trasladado a PSOE y BNG —los grupos que componen esta legislatura la oposición— la creación de una «comisión de estudio que os permita definir juntos el pacto de reactivación que precisa y merece nuestra tierra». «Hoy más que nunca no es momento de egoísmos sino de trabajar juntos por el bien común» , ha sentenciado.
«Apelo al espíritu de entendimiento que la sociedad gallega demostró en estos meses y que debemos reproducir ahora en esta Cámara para afrontar los grandes retos que tenemos: el reto sanitario y el reto socioeconómico».