Fotografía
Exposición 'A vida lenta': El rural lucha contra el olvido
La muestra es un viaje pionero en España por las costumbres de los campos gallegos en el siglo XX
«Se trata de un viaje, un recorrido para recuperar todo lo que el tiempo ha borrado sobre el rural gallego»: así define la exposición ‘A vida lenta. Memorias e ritmos do rural galego’ su organizador, Aser Álvarez . Durante casi dos años, este productor y director gallego se ha dedicado a estudiar las imágenes de los fondos del Ministerio de Agricultura en busca de una muestra que, por fin, pudo ver la luz la pasada semana. «No es una mirada al pasado, ni mucho menos a una Arcadia perdida», reflexiona en conversación telefónica con ABC, «queremos que la gente piense y se abra así un debate sobre a donde queremos ir», sobre cuál será «el futuro del rural gallego».
La exposición, que estará abierta al público en la sede de Afundación en Vigo hasta el próximo 29 de mayo , conjuga más de 70 fotografías, más de 40 minutos de piezas audiovisuales, fragmentos poéticos y música pensada y compuesta especialmente para este proyecto, de la mano del compositor Moisés Quintas, «gran conocedor de la música tradicional gallega». Una melodía propia inspirada en esas canciones «que pasaban de padres y madres a hijos, aunque no estuviesen escritas», confiesa Álvarez. Unos sonidos que recrean el chirriar de los carros, el aullar de los lobos, el girar de las ruedas de molino o el afilar de las guadañas. «Esperamos que la gente se deje llevar por la experiencia que se le ofrece», añade. Toda la muestra hace un recorrido desde 1930 hasta finales del siglo XX, «unos años tremendamente duros ya no solo para el rural, si no para España en general», contempla su organizador.
Es la primera muestra en abordar los fondos gallegos catalogados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, por lo que se trata de un proyecto «extrapolable» al resto de comunidades, «para dar a conocer el valor incalculable» de sus espacios rurales, valora Álvarez. Al menos por el momento, su deseo tras más de dos años de investigación es que tenga su oportunidad, al menos, en las siete ciudades: « Es una lucha contra el alzhéimer colectivo que existe » cuando se habla de los campos gallegos.
Todo ello, tratando de hacer una lectura contemporánea sobre la Galicia rural «que nos lleve a evitar el pasado reciente, hacer una reflexión en nuestros tiempos », tal vez aún con más hincapié y «más motivo», después de la pandemia que está asolando el panorama mundial, contextualiza Álvarez.
«Es un homenaje a todas las generaciones que trabajaron en el rural antes que nosotros (...) y que, desde luego, muestra el caracter solidario y comunitario de la Galicia rural», insiste. Y lo que parece ser el eje central de la exposición: «Lo que antaño había sido denostado como antítesis del progreso, se contempla ahora como posible solución de los desequilibrios de demografía territorial», apunta Afundación en un comunicado.
Figuras destacadas
Se trata, en palabras del organizador, de una muestra tremendamente «colaborativa», porque los documentos han sido examinados y expuestos por varios profesionales, combinando elementos efectivamente audiovisuales, fotográficos y melodías. Unos documentos que se completan con actividades en línea e invitados reconocidos incluso a nivel nacional . Estarán presentes, por ejemplo, el actor y director Oliver Laxe, que está trabajando en un centro de desarrollo rural en la aldea lucense donde filmó ‘O que arde’; o la ilustradora y muralista Xoana Almar, de la Cooperativa Cestola. De lunes a sábados, en Afundación Vigo, hasta concluir mayo.