Efectivos de paisano, patrullas uniformadas y perros adiestrados controlan la Catedral

El dispositivo policial también afecta a puertos, aeropuertos y otras infraestructuras

Labores de vigilancia en la Catedral tras los atentados del Charlie Hebdo MUÑIZ

PATRICIA ABET

La alerta terrorista decretada tras los atentados que segaron la vida de 129 personas en París el pasado viernes ya se deja notar en Galicia. Después de que el delegado del Gobierno , Santiago Villanueva, anunciase este lunes el refuerzo de las medidas de control a las que obliga el nivel 4 de alerta que rige en todo el territorio nacional, tanto Policía como Guardia Civil se han puesto en marcha para extremar la vigilancia en las consideradas «zonas calientes». Es decir, «en los puntos de confluencia de personas, zonas de tránsito de viajeros como puertos y aeropuertos, estaciones, intercambiadores o zonas comerciales y de ocio», tal y como explica una circular remitida al Instituto Armado por la Secretaría de Estado de Seguridad a la que ha tenido acceso ABC.

En el caso gallego cobra especial relevancia el control de la Catedral de Santiago y su entorno, donde ayer se empezaron a ver agentes de la Unidad de Guías Caninos acompañados con perros adiestrados para la detección de explosivos. A ellos se suman tanto patrullas de la Policía Nacional como agentes de paisano que recorrerán las inmediaciones del templo compostelano para blindar su seguridad ante cualquier posible amenaza. A este respecto, Villanueva aseguró que este despliegue policial habilitado tras los trágicos atentados en el país vecino afectará tanto a la capital gallega como a otras zonas de la Comunidad, incluidos puntos como los depósitos que suministran agua a las poblaciones.

La máxima seguridad

El refuerzo de las medidas de vigilancia —que se mantendrá activo mientras dure el nivel 4 de alerta — no afectará a la libre circulación de personas, aunque Villanueva sí remarcó que «todas las medidas que se puedan tomar para garantizar la seguridad de los vecinos de Santiago y de sus visitantes, al igual que en otras ciudades, se tomarán». Pese a todo, los agentes confían en que la intensificación de los controles no afecte al día a día de la ciudadanía y aclaran que el despliegue constará de dos partes. Una de ellas agrupa a los efectivos que patrullarán uniformados, y que serán la cara visible de estos controles . Por las mismas calles se desplegarán efectivos de

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