LA POBLACIÓN DEL SERGAS
Un 14% de pacientes genera más de mil euros de gasto anual en recetas
El 1,43% de usuarios de gran complejidad acumula más de tres de urgencias anuales
El envejecimiento de la población y la cronificación de enfermedades son el resultado del éxito de la ciencia médica y de la atención sanitaria, la cara de una moneda que en su cruz lleva implícito el reto de reorganizar la asistencia para responder a las nuevas necesidades de cuidados y atención.
Entre las medidas esbozadas por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en enero —cuando los grupos de trabajo liderados por la Consellería comenzaban a debatir la estrategia gallega para la remodelación de la Atención Primaria que la Xunta prevé tener lista en pocos días—, figuraba la «ponderación adecuada» de la «complejidad» de los pacientes incluidos en los cupos médicos (los asignados a cada facultativo de familia). El objetivo: reequilibrar los cupos para aligerar carga de trabajo a profesionales con mayor volumen de pacientes complejos y demandantes de atención, enfocando la actuación en un primer momento en aquellos médicos de familia con una alta proporción de usuarios mayores de 70 años (con mayor probabilidad de patología crónica) y en las consultas de Pediatría de Primaria con mayor concentración de niños menores de tres años.
En el último acuerdo suscrito entre el Sergas, los colegios médicos y las sociedades científicas de la Medicina Familiar y Comunitaria se establece asimismo que el refuerzo comprometido de especialistas —60 adicionales en dos años— se destinará preferentemente a los centros de salud con cupos medios superiores a las 1.400 tarjetas sanitarias , «ajustadas por complejidad, y con porcentajes de pacientes mayores de 75 años mayor del 15%».
En el conocimiento de las necesidades de su población adscrita el Sergas trabaja a través de una serie de algoritmos de clasificación que permiten agrupar a los pacientes en función de su riesgo y su calidad de salud con el objetivo de perfeccionar la gestión de los pacientes , especialmente los crónicos, y programar actuaciones específicamente dirigidas a ellos parar intentar reducir su riesgo.
Además de la edad, entre los criterios tomados en cuenta para la estratificación se tienen en cuenta factores como el volumen de prescripciones farmacéuticas activas, la duración de los tratamientos, el número de consultas en el centro de salud o de visitas anuales a urgencias o la cantidad de ingresos hospitalarios y de pruebas diagnósticas. En la base de la pirámide se sitúa la población sana , descrita como usuarios con visitas médicas esporádicas y prescripciones farmacéuticas puntuales de corta duración. El colectivo compuesto en un 50% por menores de 38 años representa en la actualidad el 52,17% de la población del Sergas, 1,3 millones de usuarios totales de la sanidad gallega, con un consumo sanitario bajo, una media de 16,94 euros de gasto anual para la sanidad pública en recetas de calle y poco más de siete ingresos hospitalarios por cada mil.
La pirámide sanitaria gallega
En la cima de la pirámide se sitúan aquellos pacientes de mayor complejidad: un 1,43% de los usuarios totales de la sanidad pública gallega — cerca de 40.000 en cifras totales — con mala calidad de salud y un volumen importante de consumos farmacéuticos, visitas médicas a especialidades hospitalarias, urgencias e ingresos. El 75% de los pacientes integrados en este grupo son mayores de 52 años y sus indicadores de consumo sanitario reflejan una media de en torno a 1.500 euros mensuales de gasto en recetas , un tasa de frecuentación de urgencias superior a tres por persona y año y cerca de un ingreso hospitalario urgente por cada ejercicio.
Un escalón más abajo, todavía con una demanda intensa de servicios, los pacientes con complejidad media, un grupo compuesto en un 50% por mayores de 71 años que en la actualidad engloba a un 11,85% de la población del Sergas. El coste medio de las recetas de farmacia de este segundo grupo se sitúa de nuevo por encima de los mil euros anuales , su tasa de visitas a urgencias roza la dos anuales y presentan una tasa de hospitalizaciones de urgencia de 754,57 por 1.000.