POLÍTICA
El tripartito de Alicante pedirá 20 millones para pagar nóminas en enero
Al asumir el cobro de los tributos ya no cuenta con Suma para disponer de adelantos

El tripartito que gobierna Alicante tendrá que recurrir a un préstamo de emergencia de 20 millones de euros para poder pagar a partir de enero sus gastos corrientes más básicos, como las nóminas de sus funcionarios, la Seguridad Social o las amortizaciones de otros créditos, entre otros. La razón es que no podrá contar con el volumen más importante de la recaudación de impuestos hasta el verano.
Técnicamente, este recurso financiero se va a materializar como «operación de tesorería» y el Ayuntamiento tendrá que devolver el dinero en junio. Esta «falta de liquidez» no la sufren los otros municipios de la provincia desde que prácticamente todos delegaron la recaudación tributaria a la agencia Suma, dependiente de la Diputación, que les proporciona adelantos del cobro.
Pero una de las primeras medidas fulminantes del equipo del alcalde Gabriel Echávarri fue precisamente rescatar estas tareas y prescindir de Suma por el «ahorro» para las arcas municipales. Ahora tendrá que asumir el coste en intereses de ese préstamo, aunque sea de rápida amortización.
Durante la pasada legislatura, las críticas desde los grupos municipales del PSOE y Esquerra Unida fueron frecuentes por la situación de «quiebra» que achacaban al municipio por la «mala gestión» del PP al no poder asumir los pagos más perentorios. Ahora, en cambio, a los cinco meses de tomar las riendas del gobierno local tienen que acudir al banco a por fondos. En la propuesta de acuerdo aprobada ayer queda constancia también de que los ejercicios de 2013, 2014 y lo que va del actual -etapa del PP- se han cerrado con superávit y cumpliendo con el «equilibrio» presupuestario.