Ni hecho a propósito

El año tiene 365 días y 12 meses, quizá por eso llame más la atención que sea un 1 de diciembre cuando entre en vigor la prohibición de circular por el casco antiguo de Valencia en Ciutat Vella. Si, en el mes de mayor volumen de compras, con el pequeño comercio tiritando en mitad de la pandemia, el Ayuntamiento de Valencia activa el procedimiento sancionador entre las críticas de vecinos que destacan la dificultad para activar el registro de los vehículos propios y los comerciantes, a los que Compromís lleva en el corazón cuando habla del pequeño comercio pero de los que pasa en situaciones com ésta. Pleno para el que decidió que todo esto arrancase el 1 de diciembre.

Paralelamente la iluminación elegida para Valencia durante las navidades, tampoco competirá con la de los parques Disney. Poca entidad tiene presentar como argumento de defensa que se invierte más de lo que hizo el último gobierno municipal del PP en 2015 cuando no había ni para pagar la luz, al precio de antes no de ahora. Hay cuestiones en la gestión a las que además de dinero hay que ponerles cariño, y de esto último y mirando a las navidades desde el Ayuntamiento se pone lo justo y necesario para cumplir el expediente.

Y todo esto termina en la cabalgata de reyes . Un mes antes de que SSMM de Oriente lleguen a Valencia ya se ha notificado desde el consistorio que el paseo de los reyes magos se reduce a la mínima expresión, sin caravana de acompañamiento y para que se realice en el menor tiempo posible. Resulta que durante los próximos 30 días y si no hay contraorden mi hijo seguirá yendo al colegio, los locales de ocio nocturno se llenarán día si día también, más de 30.000 espectadores nos reuniremos en Mestalla para asistir a la desintegración por capítulos del Valencia, y por supuesto las salas de cine se llenarán para asistir a los últimos estrenos. Pero resulta que con todo eso la noche del 5 de enero, la más bonita y la más mágica del año, es un peligro salir una y media a la calle para ver pasar la cabalgata que acompaña a los reyes. Que curioso, y a la vez, que raro....