¿Estamos ya en septiembre?

Y llegó septiembre. Con su clásico final de vacaciones, añadido este año a unas Fallas descolocadas , gota fría adelantada y la bronca de Podemos que de rebote salpica al Consell. Así que, por partes.

Dejamos atrás un verano con toque de queda, restricciones y mayor número de contagios pero con la sensación, para casi todos menos para el ocio nocturno, que 'aquí no pasa nada'. El turismo salva la campaña, encontrar en agosto una mesa para cenar ha sido más difícil que ver a Peter Lim invirtiendo en fichajes, y ya tenemos fecha otra vez para la 'nueva normalidad', será el 9 de octubre. Ojalá se cumpla, pinta de que sea así no tiene mucha.

Mientras la redacción de este artículo se lleva a cabo en mitad de las Fallas, si de las Fallas, ni actos falleros ni gaitas. Pasacalles, carpas y vida 'normal' en los casales, más controlado en los actos públicos. La fiesta ha tenido lugar por la emergencia económica de muchos sectores relacionados con la fiesta , lo entiendo y aplaudo, porque las decisiones en pandemia vuelvo a recordar que no se toman por un único criterio sanitario. Pero, de ahí a las carpas, hay un camino lleno de piedras que puede saltarnos en la cara dentro de dos semanas.

Mientras tanto el fin de las vacaciones ha llegado pasado por agua . Registros de récord en agosto y la sensación real de que lo del cambio climático como el Covid-19 ha llegado para quedarse. El Mediterráneo es terreno proclive a sufrir la agresividad de los fenómenos naturales, pero o el mundo se pone de acuerdo, incluido China, o buscamos cómo colonizar Marte, porque aquí nos queda poco que hacer.

Y el curso comienza con la marcha del Consell de Rubén Martínez Dalmau . Se va porque en Podemos de la Comunidad, que no País Valenciano, se hace lo que dice Pilar Lima , luego lo que decide Pilar Lima y terminamos con lo que exige Pilar Lima. Es muy fácil. Si te gusta, fenomenal; sino, te vas. Dalmau se va como vino, anónimo. En la Comunidad se desahucia en 2021 a más personas que nunca, señal que por mucho que lo quieran disfrazar, Dalmau de gestión cero patatero.

Nos vemos la semana que viene, ya sin Fallas, espero sin gota fría y con Illueca de vicepresidente del Consell, que no es lo mismo, pero da igual.