Imagen de archivo de un control del toque de queda en Valencia MIKEL PONCE
Alberto Caparrós

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La Comunidad Valenciana se despertó el martes 8 de junio tras la última noche bajo el toque de queda con una incidencia de apenas cuarenta contagiados por cada 100.000 habitantes. Tras siete meses de restricciones a la movilidad nocturna y las reuniones sociales y familiares la pandemia del Covid-19 parecía controlada.

Este martes, la Comunidad Valenciana se acuesta con el coronavirus fuera de control , con transmisión comunitaria , en situación de riesgo alto de propagación de los contagios y con una incidencia acumulada de 216 casos por cada 100.000 habitantes, cinco veces más que hace un mes.

La escalada de contagios y nuevos brotes de Covid-19 ya se ha trasladado a la presión hospitalaria y, además, este martes la Conselleria de Sanidad ha vuelto a notificar cuatro fallecimientos como consecuencia del coronavirus.

El nuevo escenario epidemiológico ha cogido a la Comunidad Valenciana en plena prórroga de las restricciones decretadas por la Generalitat , que inicialmente están en vigor hasta el 15 de julio.

Sin embargo, el presidente autonómico, Ximo Puig , ha anunciado para este miércoles una reunión con los responsables de Salud Pública y los expertos que le asesoran sobre el coronavirus con el objetivo de analizar un posible endurecimiento de las medidas. Regiones como Castilla y León han reclamado al Gobierno el retorno al toque de queda entre la una de la madrugada y las seis de la mañana. Otras autonomías, como el caso de Cataluña , han optado por cerrar el ocio nocturno en interiores.

La Generalitat Valenciana no desvela sus intenciones a la espera de eschuchar a los expertos mientras el sector de los locales de ocio ha convocado una protesta este jueves ante el temor de un nuevo cierre en plena temporada de verano.

Inicialmemente, Puig abogaba por esperar a a evolución del coronavirus durante este semana antes de tomar decisiones, pero el aumento de casos y la presión de sus socios de Gobierno de Compromís y Podemos pueden precipitar los acontecimientos.

El incremento de los contagios y la propagación de la variante delta , que ya está detrás del cincuenta por ciento de los nuevos casos, abocan a la Generalitat a endurecer las restricciones.

En cualquier caso, para decretar medidas como el toque de queda o el límite de participantes en reuniones sociales para evitar prácticas como el botellón, la Generalitat debería contar con el visto bueno previo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación