Desescalada
Valencia Fase 2: playas controladas por drones y una app en Cullera para un verano «como los de antes»
La localidad costera valenciana vigilará el aforo de los arenales con la vista puesta en el turismo nacional por la pandemia
En directo | Última hora del coronavirus y la desescalada en la Comunidad Valenciana
La entrada en la fase 2 de la desescalada de la Comunidad Valenciana -previsiblemente el próximo 1 de junio, a la espera de que el Ministerio de Sanidad lo confirme- permitirá la reapertura de las playas al baño . Los arenales ya se han utilizado en muchas localidades valencianas para los paseos y la practica deportiva, pero con el avance en el desconfinamiento las restricciones se van relajando.
Por ello, los municipios costeros ultiman los detalles para poder reabrir estos espacios con las máximas garantías de seguridad. El Ayuntamiento de Cullera ha anunciado este martes que controlará el aforo de sus playas a través de una aplicación propia con la información suministrada por los drones -pilotados por la Policía Local- que sobrevolaran sus más de quince kilómetros de costa.
De hecho, aunque las playas de Cullera se encuentran entre las más extensas de toda la Comunidad Valenciana, el alcalde del municipio, Jordi Mayor, ha asegurado que no se preven «problemas de aforo». «Ni en uno de los mejores domingos de agosto se han saturado las playas» , ha explicado.
A la espera del protocolo autonómico que la Generalitat ha elaborado, el plan de este consistorio contempla intensificar la limpieza y desinfección de las zonas comunes, como los lavapiés, para poner en valor Cullera como un destino seguro de cara a la temporada alta.
En busca del turismo nacional
Tanto es así que el Ayuntamiento ha lanzado una campaña bajo el lema «Un verano como los de antes» para atraer el turismo nacional estos próximos meses, rememorando los periodos estivales que «muchas generaciones de españoles de los 60 y los 70 pasaron en Cullera», ha comentado Mayor.
La campaña promocional apela al «placer de las pequeñas cosas» y apuesta por «construir recuerdos y vivencias», que tras esta «situación inevitable» han cobrado especial importancia. «Un castillo de arena, unos amigos que lo serán para toda la vida, tal vez el primer amor, un atardecer, un libro o un concierto... Éstas fueron las cosas que hicieron de aquel verano en Cullera el mejor verano de sus vidas», ha añadido el primer edil.