Tres horas de espera en urgencias porque los médicos estaban de fiesta

Los hechos sucedieron en el Hospital de Sagunto. La paciente, embarazada, denuncia que los médicos y enfermeras no les atendieron porque estaban de celebración

Sala en la que médicos y enfermeras celebraban la despedida de un compañero LAS PROVINCIAS

ABC.es

Una hora de espera en urgencias suele ser un tiempo más que habitual. Pero si durante ese rato escuchas gritos desde una sala contigua como «al centro y 'pa' dentro» o el sonido de vasos brindando, la espera se hace más difícil. Eso es lo que le ocurrió a una embarazada en el Hospital de Sagunto : durante su espera en la sala de urgencias tuvo que aguantar a que los médicos y enfermeros terminaran su «fiesta», según informa Daniel Guindo en Las Provincias .

En la sala adjunta a donde los pacientes esperaban con resignación a ser atendidos, el personal del hospital brindaba con cava y vino y compartían canapés . Mientras, algunos enfermos tuvieron que esperar hasta tres horas para recibir atención médica.

La joven que ha denunciado los hechos en Las Provincias ha presentado una queja en el hospital, otra en la Consejería de Sanidad y ha pedido el cambio de centro.

«La paciente acudió al servicio de urgencias de maternidad a las 10.59 horas y permaneció en dicho servicio hasta las 12.11 horas. Durante este tiempo, una hora y doce minutos, la paciente fue atendida correctamente realizándosele las exploraciones y pruebas complementarias precisas para llegar a un diagnóstico correcto», ha comunicado el hospital para defenderse.

La denunciante, Laura, embarazada de 24 semanas y que acudió al hospital por fuertes toses y dolor abdominal, critica que estuvo en la sala de espera «totalmente desatendida», y defiende que no pasó más tiempo «porque me planté en la sala». Además, según su versión, no le dieron nada para calmar la tos hasta tres horas después de llegar a urgencias.

Tal y como la denunciante ha declarado a Las Provincias, una vez que descubrió a los médicos en esa sala la exploraron para asegurarse de que su bebé estaba bien y la enviaron a urgencias generales: «Nos acompañó la recepcionista que nos decía que estaba indignada con la situación, que llevaba toda la mañana haciendo cafés . En urgencias generales me dijeron que no entendían por qué me habían mandado allí, me auscultaron y me hicieron salir a la sala de esperas hasta las 13.45 horas», lamenta.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación