Si yo fuera candidato

Y el 26 de junio... a votar. La broma de acudir de nuevo a las urnas costará entre unas cosas y otras cosas casi 125 millones de euros, o lo que es lo mismo, 25.000 millones de las antiguas pesetas, dato que al político le entra por una oreja y le sale por la otra , da igual, al final el que corre con los gastos de la fiesta es el contribuyente.

El Rey no ha firmado todavía el decreto que disuelve las Cortes y convocatoria de nuevos comicios cuando TODOS los políticos, candidatos o no ya se han lanzado a tumba abierta en busca del voto . Para reflexionar. Estos casi cinco meses han servido para poco en lo práctico, pero para mucho en lo que a retratar a más de uno se refiere.

Este tiempo ha demostrado que la “nueva” política que algunos pretenden vender no existe . Todos miran por lo suyo, los vicios son comunes, sólo hay una distinción entre las distintas formaciones, la mochila de la gestión. Los que han gobernado la llevan a rastras y es arma arrojadiza, los que no la tienen es por la simple cuestión de que no han tocado poder, de hecho y sin mandar, financiaciones raras y cuestiones poco éticas ya han saltado a la primera línea.

Con todo esto, en menos de dos meses, habrá que volver a decirle a nuestros dirigentes que negocien y se pongan de acuerdo, no lo harán, seguirán a lo suyo. A veces pienso que ha hecho este país en otra vida para tener esta clase política, los españoles no la merecen. Y llegado a este punto una duda y una sugerencia ¿Que campaña van a hacer las distintas formaciones políticas? ¿Con que cara se van a plantar delante de los ciudadanos? Se que no puede ser, que la ley no lo permite y que juridicamente lo que expongo a continuación es una utopía, pero, ¿No hay forma de abreviar el proceso? ¿Hay que esperar al 27 de junio para que la pantomima vuelva a empezar? Si yo fuera candidato me pensaría seriamente lo de no hacer campaña, puede ser un punto a favor. El ciudadano no puede más, y el sistema tampoco...