Sempre Valéncia

En estas elecciones España y la Comunidad Valenciana nos jugamos mucho , en serio. Desde la consolidación de la recuperación económica y el crecimiento y la vuelta al mercado de laboral de miles de españoles hasta la estabilidad, cohesión y el fortalecimiento de derechos y libertades de los que disfrutamos desde hace ya casi 40 años. Desde la improvisación concurren algunos partidos cuyas propuestas en economía van desde la indefinición o como mucho con ocurrencias más propias de políticos de laboratorio, a otros que parece inspirarles la economía planificada más propia de los soviets, y cuando no un programa electoral ( lo digo por Pedro Sánchez ) que consiste en derogar todo lo construido en esta difícil y compleja legislatura; en la que se ha evitado por ejemplo que fuéramos objeto de una intervención por parte de la UE, superando la quiebra y el rescate, que hubiera supuesto entre otras consecuencias la pérdida del 20% de la cuantía de las pensiones de nuestros mayores. Disfrutamos de un sistema político basado en la Constitución de 1978 que ha logrado que varias generaciones de españoles seamos ajenos a los enfrentamientos fratricidas que tantas veces han asolado nuestra piel de toro. Uno de los elementos fundamentales en nuestra máxima norma es el nuevo modelo territorial, con el equilibrio entre los conceptos de unidad de España y el de la pluralidad de sus nacionalidades y regiones , como características complementarias que enriquecen nuestra historia pero que en ocasiones provocan fricciones por los egoísmos de ciertas élites, ya sean periféricas o centralistas.

Y es en el Estado autonómico donde tenemos, ahora mismo, un gran desafío , el proceso rupturista catalán, que a los valencianos nos afecta en mayor grado que a otros, y no solo por nuestra vecindad, sino por el hecho de existir un maquiavélico proyecto llamado «Paises Catalanes» que cuenta con apoyos en ambas autonomías -afortunadamente residual entre l@s valencian@s- e incluso simpatías entre los partidos emergentes, entre las que podemos citar al partido cuyo líder --Sr.Rivera- el término en cuestión no le desagrada… « Paisos Catalans no em desagrada» (Rivera dixit) . Algunos de los que intentan ofrecer improvisadas recetas para todo, proponen como única solución a los retos de España la «reforma constitucional» sin aclarar que parte ni cómo ni realmente para qué, cuando es el propio texto constitucional el freno a muchos de los desvaríos actuales. Un ejemplo es el artículo 145.1 -que incorpora el espíritu y letra del art. 13 de la Constitución de la 2ª Republica- cuya oportunidad, y valor político, jurídico y simbólico es hoy más que nunca un precepto que desde el PP queremos poner en valor.

Este artículo en su apartado primero dispone «En ningún caso se admitirá la Federación de Comunidades Autónomas» y su inclusión, después de duras negociaciones y debates, en la Carta Magna se debe a la enmienda de un diputado valenciano de Alianza Popular, D. Alberto Jarabo Payá, que tuvo una gran visión de futuro, para evitar que movimientos pancatalanistas tuvieran la más mínima posibilidad y esperanza en lograr sus propósitos con la redacción constitucional actual, por eso existen tan diferentes intereses en su modificación en un viaje sin una clara ruta y un destino aún más ignorado… pero que pretende atacar la integridad territorial valenciana y su identidad propia. El precepto 145.1 de la Constitución blinda el autogobierno valenciano y nuestra integridad territorial ante los guiños, complicidades y peajes que los representantes del tripartito instalado en la Comunidad Valenciana (PSOE+Compromís+Podemos) tienen con el soberanismo catalán, pues no olvidemos que la deriva rupturista del independentismo catalán la ve con simpatía, adhesión y buenas palabras la «lideresa» del Pacte del Botanic. Ante este escenario, el Partido Popular valenciano es la garantía para evitar la alteración desleal, insolidaria o unilateral de nuestras instituciones de autogobierno, identidad y cohesión territorial, estrategia que algunas coaliciones con su acción y otros «emergentes» con su colaboración consideran que «ara es el moment» de consumarla.

Por eso en estas elecciones hay que votar más en serio que nunca, el valor de un voto… Valencia, España está en juego y la opción que represento, el PP, es la única que puede darnos estabilidad, fortaleza y progreso… y puede asegurar que Valencia siga siendo Valencia. Ahir, hui, sempre… Valéncia .

*Candidato núm. 4 del Partido Popular por Valencia al Congreso de los Diputados