HISTORIA
El retiro de Germana de Foix
La última reina de Aragón y virreina de Valencia vivió sus últimos días en la localidad valenciana de Llíria
Sobrina del rey de Francia Luis XII y segunda esposa de Fernando el Católico, doña Germana de Foix fue la última reina de Aragón y virreina de Valencia .
La historia de España habría sido diferente si el hijo que tuvo con Fernando no hubiera muerto a las pocas horas de nacer y si su hija con Carlos I de España y V de Alemania hubiera sido reconocida por éste.
El romance que mantuvo Carlos con su «abuelastra» vio peligrar el reinado y, para apartarla de él, se decidió su casamiento con el marqués de Brandeburgo , aunque quedó viuda pronto y el emperador ordenó un nuevo matrimonio con el duque de Calabria . Nombró a ambos virreyes y lugartenientes generales de Valencia , desempeñando sus funciones entre 1526 y 1536, año en que falleció doña Germana.
Alabada por su destreza para la música y el baile, creó un ambiente de corte en el Palacio Real, con aficiones festivas y literarias.
Conocido es también su papel de enviada del emperador en la represión de la revuelta de los agermanados , a los cuales confiscó los bienes y emprendió un proceso de refeudalización.
Germana de Foix murió en Llíria a los 48 años de edad , probablemente de hidropesía (acumulación de líquidos) debido a su sobrepeso pese a haberse caracterizado en el pasado por una figura esbelta.
A esta localidad valenciana se retiró con su marido , ya que ambos mantenían vínculos con la Orden de los Jerónimos. En una masía propiedad de éstos y denominada «El Espinar» falleció, y allí se conserva la reproducción exacta de la lápida original: «En este histórico monasterio a la sazón de los monjes Jerónimos falleció 15 de octubre de 1536 siendo Reina Gobernadora de Valencia Germana de Foix esposa que fue del rey D. Fernando el Católico Marquesa de Brandemburgo y Duquesa de Calabria. Cien clérigos con antorchas acompañaron sus restos mortales hasta Valencia, donde reposan en el Monasterio de S. Miguel de los Reyes. In memoria scripsit».
En su testamento, que hizo junto a su esposo, ordenó que de sus bienes y hacienda se edificase un monasterio , cuya construcción fue promovida por el duque de Calabria. Las obras de San Miguel de los Reyes comenzaron sobre 1548 y duraron hasta el siglo XVIII. En el altar mayor se conservan actualmente los restos de doña Germana y don Fernando .