Juan Zumalde - VERLAS VENIR
Poder para el blogger
«A lo largo de los últimos años los periodistas están desapareciendo de los actos públicos»
La ausencia de periodistas empodera al blogger. Para que le quede claro de qué va esta columna, le voy a explicar cómo el poder de influencia que hasta hace poco amasaban (si, como las fortunas) los medios de comunicación se está trasladando poco a poco a los blogs, que también son medios de comunicación, aunque no tanto.
A lo largo de los últimos años los periodistas están desapareciendo de los actos públicos. No, de la rueda de prensa del president del Consell no. Pero de otros muchos actos de menor entidad sí . Claro, es que cada vez hay menos periodistas. Ya. Pues eso, cada vez menos.
Y los protagonistas de este tipo de actos es cierto que no son el presidente del Consell, pero no es menos cierto que generalmente son personas importantes , destacadas por algún motivo. De otra forma no estarían ahí.
Y ocurre que estos protagonistas desatendidos por los medios empiezan a ver proliferar ante si una nueva figura de comunicador, el blogger. Y, poco a poco, empiezan a reconocerse en él. Y visitan su blog. Y les gusta. Y deciden que el blogger ya es algo más, es un influencer. Y se olvidan del periódico que previamente se olvidó de ellos . Y la capacidad de influencia pasa al blog, y la inversión publicitaria también y, mientras tanto, los periódicos encadenan a sus pocos periodistas a la mesa de redacción para gestionar contenidos, organizar tareas…
El blogger es, en el mejor de los casos, un periodista de estos que sobraban en las redacciones y que ha encontrado otro tipo de modus vivendi, alejado de la nómina estable, pero vinculado con la comunicación. En el peor, alguno he visto, es un jeta que abre el blog de cocina para comer gratis en los restaurantes o el de viajes para conocer mundo de gratis.
Dicen los estrategas del marketing político que el PP logró el poder en la Comunitat y lo mantuvo durante tantos años gracias a que se imbricó en dos mundos que el PSPV había despreciado: el fútbol y las fallas.
Pues esto es algo parecido. Hacerse invisible ante estos agentes sociales de supuesto segundo nivel acabará por hacer que los medios de comunicación se hagan invisibles ante la sociedad en su conjunto. Será un paso más en el harakiri en el que se metieron las empresas de comunicación cuando dejaron de ser dirigidas para pasar a ser gerenciadas , después convertirse en financieras cotizadas en bolsa y luego endeudarse por encima de sus posibilidades para seguir creciendo. El último paso es el de retirar a los periodistas de la calle y entregar el poder al blogger.