Por una nueva política para 2016

Es uno de los deseos para este nuevo año que empieza. Dudo mucho que se haga realidad, pero por lo menos valdría la pena intentarlo. Comento que dudo que se hará realidad el deseo vistos los acontecimientos con los que se ha finalizado el año y toda la crisis entre instituciones por el nombramiento por la “Dipu” del marido de la consellera Montón .

También lo dudo visto que una minoría irrisoria, a nivel de número de ciudadanos que representa la CUP , decide poner o quitar gobiernos en Catalunya. Y, por último, también lo dudo cuando en Valencia se divide a la sociedad entre laica y no laica a ritmo de cabalgatas.

Mi deseo para 2016 sería poder disponer en España de un gobierno estable y sustentado por una mayoría social de partidos “centrados”, bien pueden ser socialdemócratas, conservadores o liberales. Donde predomine el interés general por encima del propio interés político y que ponga las herramientas necesarias para situar a España ya por fin en una senda sólida de crecimiento económico y empleo. La ciudadanía está cansada de las ruedas de prensa de los diferentes portavoces de las formaciones políticas que sólo exponen argumentarios trufados dirigidos a que no se les enfaden sus propios votantes.

También deseo para la Comunitat Valenciana un gobierno con altura de miras, que no gobierne al dictado de lo que dice su vicepresidenta los viernes, tras el pleno del Consell. Donde ella, Oltra , dispone cuándo va a haber una remodelación del Consell, cuándo las “pifias” que hace su gobierno son “éticas o estéticas”, cuándo hay que reformular el “Pacto del Botánico” o, por ejemplo, con quién se aliará de cara a 2019 su formación, Compromís , con el único interés, individual y futuro, de ser ella la presidenta.

Deseo una renovación en el Partido Socialista valenciano. Entramos en año de congresos internos y el PSPV tiene la dicotomía de gobernar la Generalitat después de más de 20 años pero teniendo el mínimo apoyo ciudadano de toda su historia. Su madurez política será la clave de no ser rehén de sus pactos.

Por último también deseo un PPCV que acabe de sufrir una renovación interna en sus estructuras, que unido al liderazgo de Bonig continúen la sólida senda de liderar el espectro del centro derecha valenciano.

En definitiva son deseos, que los días y las semanas dirán si se pueden cumplir o sólo se quedan en eso... deseos. ¡Feliz Año!