El Mercado Central avisa a Ribó: las restricciones al tráfico provocan pérdidas económicas

La política de movilidad y accesibilidad al centro de Valencia del actual Ayuntamiento, resumida en restringir el paso de los vehículos privados y peatonalizar el entorno de la Lonja de la Seda, está « afectando muy negativamente a los clientes y vendedores del Mercado Central». Así lo asegura el presidente del Mercado Central, Francisco Dasí , en una carta abierta dirigida al alcalde, Joan Ribó , en representación de todos los vendedores del Mercado.

En su carta, Dasí explica que «las consecuencias [de la política de movilidad] están siendo nefastas para los intereses económicos tanto del Mercado como de todos los comercios de su entorno, y las molestias para la mayoría de los vecinos que quieren venir a comprar a nuestro mercado, absolutamente indeseables». Dasí considera que «el argumento de proteger la Lonja , sin duda edifico único y emblemático, nunca debió servir para asfixiar el acceso en vehículos a nuestro entorno, y pasar por encima de una realidad también patrimonial, y además económica , social y comercial como es el Mercado Central».

El presidente de los comerciantes del Mercado Central asegura que «todos los días tenemos que oír testimonios de nuestros clientes que nos relatan las molestias en el acceso por colas en San Vicente, o desvíos por parte de la Policía Local en la Avenida Maria Cristina, o las dificultades por el alejamiento de las paradas de autobuses, sino su eliminación». Y recuerda que «son valencianos y valencianas de esta ciudad, que quieren consumir productos de calidad de nuestra tierra en gran parte, que optan por el modelo de comercio y de alimentación tradicional que también forma parte de nuestro patrimonio», y a los que las dificultades para acceder al Mercado pueden disuadir.

Dasí llama la atención del alcalde sobre la supresión de líneas de autobús con parada en las inmediaciones del Mercado Central, que han pasado de ocho a dos, «algo que no entendemos de una Corporación que creíamos apuesta por el trasporte público». En este sentido, los comerciantes piden al equipo de gobierno «una seria reflexión por su parte sobre su modelo económico y de comercio, y como está afectando la movilidad en el centro al comercio tradicional y a la economía real y local».

Los comerciantes trasladan así a Ribó su preocupación porque «cada vez sea más y más difícil acceder al centro histórico», ya que «primero limitaron el acceso en coche y en bus» a la plaza del Mercado, «además de eliminar todo el aparcamiento en superficie» en la zona. Y ahora, «según nos trasladó el concejal de Movilidad», Giuseppe Grezzi , «las intenciones son seguir reduciendo el tráfico en el centro histórico : Calle de la Paz, Plaza de la Reina, Plaza de San Agustín, Calle San Vicente, Plaza del Ayuntamiento… por lo que afectará sin duda a la accesibilidad de nuestros clientes al mercado».

«Los vendedores exigimos respeto al Mercado Central», concluye la carta, «como institución y motor comercial del centro histórico , y a sus clientes, sobre todo valencianos que apuestan por un modelo de comercio y de alimentación tradicional». En apoyo de sus reivindicaciones, Dasí esgrime las «más de 2.000 firmas de clientes» del Mercado, así como «200 de vendedores» y otras 30 de comercios del entorno.