Agricultura
Más de 200 tractores colapsan Valencia para pedir auxilio para el campo
Los agriculturos denuncian que las administraciones les abandonan ante la «competencia desleal» de terceros países
Un total de 223 tractores han salido este viernes a la calle en Valencia para lanzar un «SOS» por el futuro del campo valenciano, una protesta que también se celebra en Sevilla y que mantiene las reivindicaciones de otras 'tractoradas' recientes. En la manifestación han participado más de 1.500 personas a pie, según Delegación de Gobierno.
Dos años después de la marcha de 2020 en la capital valenciana, un mes antes del confinamiento, los agricultores denuncian que el Gobierno central y la Generalitat Valenciana no les escuchan y rechazan la «competencia desleal» de terceros países a causa de los acuerdos con la Unión Europea para productos que no cuentan con las condiciones fitosanitarias, lo que genera plagas, recoge Europa Press.
A pesar de la lluvia, la manifestación unitaria ha discurrido con normalidad por el centro de Valencia, que ha partido desde la plaza San Agustín y ha subido por la calle Colón, para finalizar ante la sede de Delegación de Gobierno en el Palacio del Temple. Los organizadores de la protesta cifran la participación en más de 250 tractores, aunque preveían unos 500, y 8.000 personas .
Al finalizar el recorrido, varios agricultores han tirado productos al suelo desde los tractores para simbolizar que los venden a precios inasumibles . El suelo de la plaza del Temple ha quedado así lleno de naranjas, lechugas y cereales. También han lanzado cebollas e incluso vino y leche.
La de este viernes es la segunda de las cuatro manifestaciones de este «invierno caliente» en el campo, después de la de Murcia del 16 de febrero. Hay otra gran 'tractorada' convocada en la ciudad de Alicante para el próximo 10 de marzo , tras lo que está prevista una marcha masiva en Madrid diez días después.
«La gricultura mediterránea tiene futuro»
Como presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja), Cristóbal Aguado , ha advertido que «el futuro del campo está en peligro» tras una campaña como la actual de «auténtico desastre», en la que los productores malvenden lo que plantan muy por debajo del coste, como apunta Europa Press.
Esta situación, ha denunciado Aguado, supone el abandono de tierras , que no haya jóvenes en el sector y «la ruina de muchos agricultores». «De una vez por todas, las administraciones tienen que dar ejemplo», ha urgido, y ha reivindicado que «la agricultura mediterránea debe tener futuro» .
En la misma línea, el secretario general de la Unió de Llauradors, Carles Peris , ha lamentado que el sector afronte una situación «dramática» cuando ha «tejido» la mayoría de pueblos valencianos. Ha defendido el modelo de pequeños y medianos productores , frente al de «oligopolios alimentarios y fondos de inversión que están haciendo el agosto».
Y es que, a su juicio, no ha cambiado «prácticamente nada» para los agricultores desde la última 'tractorada' de 2020 . «Estamos volviendo a los orígenes», ha avisado, además de confiar que vuelvan las lluvias «con ganas» porque la sequía es un problema de consecuencias irreversibles.
Incertidumbre por Ucrania
El representante de la Unió también ha prevenido sobre los efectos que puede tener la invasión rusa en Ucrania para el sector agrario, ya que el país atacado es «un gran productor de cereal» y el conflicto puede incrementar el coste de los piensos para los ganaderos .
Por su parte, el secretario de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA-PV), Ricardo Bayo , ha alertado de la competencia desleal de países de otros continentes porque supone «un coladero para las plagas», como el 'cotonet' de Sudáfrica , que «está arrasando muchos cítricos en Castellón y se extiende a otras zonas a marchas aceleradas». «Así no podemos competir», ha resumido.
Además, el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro , ha llamado a «dignificar» la profesión de agricultor , recordando todo lo que han trabajado durante la pandemia para evitar el desabastecimiento. Ha animado así a los consumidores a reconocer su esfuerzo pagando el precio que merecen, ya que, tal como ha expresado, «no es posible que 18 kilos de naranjas supongan un café en un bar» .
La oposición apunta al Gobierno
Entre los políticos, el portavoz de Agricultura del PSPV en las Cortes Valencianas, David Calvo , ha remarcado que las reivindicaciones «van más allá de un gobierno concreto» y entra en «un problema estructural que ya se está abordando» desde las administraciones. «Somos conscientes de los problemas, pero no podemos dejar de tener la mirada puesta en las soluciones», ha subrayado, y ha destacado logros como el tratamiento en frío para las importaciones de naranjas sudafricanas.
Por parte de la oposición, el presidente del PPCV y de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón , ha lamentado que el campo valenciano tenga que volver a salir a la calle y ha advertido de que está en una situación «insostenible» y de «abandono» por la falta de agua, la escalada de precios o la «injusta» subida de la cuota de autónomos. «Somos la reserva de la huerta de Europa y no vamos a consentir ni un ninguneo más», ha exclamado.
También la síndica de Ciudadanos, Ruth Merino , ha reclamado un plan de choque para salvar el campo después de una campaña "catastrófica" y ha criticado que "año tras año", sus demandas caen en saco roto. Por eso su grupo parlamentario ha registrado una iniciativa en la que pide un plan estratégico de eficiencia energética para reducir el coste o más apoyo a la marca de calidad de la naranja, un incremento de los controles y las inspecciones a los productos.
Y el eurodiputado y vicepresidente de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé , ha achacado la situación del campo a la «demencial» política energética europea, ha lamentado que los agricultores pasan «más tiempo rellenando papeles que en su trabajo». Además, ha denunciado la «criminalización» del sector «por parte de la izquierda apoyada por desgracia por el PP». «No es posible una política 'verde' con números rojos», ha afirmado.
Al margen de los asistentes a la marcha, la delegada del Gobierno, la socialista Gloria Calero , ha emitido un comunicado en el que asegura que el Ejecutivo central entiende la preocupación y está «firmemente comprometido», aunque remarca que hay «circunstancias que le son ajenas». Destaca, además, la próxima puesta en marcha de la Ley de Cadena Alimentaria y que la próxima Política Agraria Común (PAC) será sostenible y estará mejor repartida.