Fútbol
Los futbolistas acusados del amaño del millón de euros del Levante-Zaragoza se enfrentan a cuatro años de cárcel
Valencia acoge el primer gran juicio en España por una supuesta estafa que pudo alterar la última jornada de Liga en 2011
Este martes arranca en la Ciudad de la Justicia de Valencia el juicio por el presunto amaño del partido de fútbol que el Levante UD y el Real Zaragoza disputaron el 21 de mayo de 2011, coincidiendo con la última jornada de Liga de la temporada. De los 42 acusados, 36 son futbolistas -algunos ya retirados- que se enfrentan a penas de hasta cuatro años de prisión por un supuesto delito de fraude deportivo.
La versión de la Fiscalía Anticorrupción, el Deportivo de La Coruña y la propia Liga de Fútbol Profesional coincide en que el Zaragoza transfirió a sus jugadores 965.000 euros -según el escrito de acusación del fiscal al que ha tenido acceso ABC- y estos se lo dieron en efectivo a los granotas para que se dejasen perder y asegurasen al equipo maño la permanencia en Primera . Continuidad que se disputaba por tres puntos con el Dépor, que sí bajó de categoría ese año.
La Fiscalía Anticorrupción ha constatado como, en fechas idénticas y próximas al encuentro, los jugadores del Zaragoza realizaron dos reintegros en sucursales bancarias: uno de 50.000 y otro de alrededor de 40.000 euros. Además, en el escrito del fiscal se hace constar que el club maño, una vez finalizada la Liga, se vio abocado a presentar concurso de acreedores por su mala situación económica, que se hubiera visto agravada si descendía a Segunda por la consiguiente disminución de ingresos.
Con todas esas sospechas, solicita penas de dos años de cárcel y seis de inhabilitación para la práctica profesional del deporte para cada uno de los 36 futbolistas procesados. La Liga de Fútbol Profesional (LFP) eleva la petición hasta los cuatro años de cárcel, la condena máxima prevista para delitos de corrupción deportiva.
Además, la LFP presentó ante el juzgado de instrucción número siete de Valencia un informe estadístico con el número de jugadas y ocasiones de tiro a puerta perdidas, para sustentar su tesis de que aquel partido fue amañado.
El Zaragoza está acusado como persona jurídica -no así el Levante- al igual que su expresidente, Agapito Iglesias - considerado por la Fiscalía como la persona que puso en contacto a ambos clubes-, dos exdirectivos, Francisco Checa y Javier Porquera, su exentrenador Javier Aguirre y el exdirector deportivo Antonio Prieto.
El caso se archivó hace dos años y se reabrió en cuestión de meses al considerar la jueza, primero- tras las declaraciones de los implicados- que no había indicios suficientes de delito, y después, la Audiencia de Valencia, que sus explicaciones eran poco verosímiles y no quedaba acreditado el destino de las transferencias que días antes del partido reciberon los jugadores del Zaragoza y que ellos mismos sacaron de sus cuentas. Los propios deportistas alegaron en su día que ese dinero había sido devuelto al club maño.
36 futbolistas en el banquillo
La vista está previsto que se prolongue durante todo este mes de septiembre , por lo que se espera que las defensas de los distintos jugadores que todavía están en activo soliciten al tribunal que puedan ausentarse -una vez hayan declarado- para no fallar a los entrenamientos.
Los jugadores y exjugadores acusados son, por parte de aquella plantilla del Zaragoza , Maurizio Lanzaro, Toni Doblas, Paulo da Silva, Ander Herrera, Gabi Fernández, Jorge López, Braulio, Ponzio, Carlos Diogo, Ivan Obradovic, Adam Pinter, Javier Paredes, Leo Franco, Jarosik, Ikechukwu Uche, Lafita, Nicolás Bertolo y Said Boutahar.
De los que formaban parte del Levante , son Miguel Pallardó, Gustavo Munúa, Rafael Jordá, Sergio Ballesteros, Juanfran García, Javi Venta, Rubén Suárez, Xavi Torres, Wellington da Silva, Jefferson Montero, Robusté, Manuel Reina, Caicedo, Cristian Stuani, Vicente Iborra, Héctor Rodas, Xisco Muñoz y David Cerrajería.