Consumo
Las latas de atún y las ensaladas en bolsa, productos estrella en la cesta de la compra de los «millenials»
Las nuevas generaciones valoran la alimentación saludable pero huyen de la cocina
Las nuevas generaciones prefieren no perder el tiempo en la cocina. La generación "millenial" en España tiene la lata de atún como producto "estrella" junto con las ensaladas en bolsa listas para comer, la pasta y otras conservas, según apunta un estudio sobre su comportamiento como consumidor divulgado este jueves en Valencia.
"Conveniencia" es una de las máximas que rigen las decisiones de compra de los jóvenes de entre 18 y 35 años, de acuerdo con el documento elaborado por expertos de l a Asociación de Empresas del Gran Consumo (Aecoc) , que analiza las diferencias de este grupo de población respecto a generaciones anteriores.
La rapidez y la facilidad de uso son dos factores importantes para este colectivo, según ha precisado Xavier Cros , responsable del estudio - basado en más de una quincena de investigaciones realizadas por Aecoc -, quien ha destacado también la preocupación de los "millenials" por una alimentación saludable.
"La palabra 'sano' aparece en casi todas las observaciones , aunque los productos tienen que estar adaptados a su acelerado ritmo de vida. Buscan una alimentación sana, pero que sea placentera y sabrosa", ha recalcado.
De hecho, esta generación compatibiliza ese interés por lo saludable con los momentos "de recompensa", cuando son más indulgentes.
"El 'millenial' es un consumidor más consciente en sus elecciones que anteriores generaciones , gracias a estar siempre conectado accede a información que influye en sus decisiones de compra", ha insistido Cros.
En declaraciones a los periodistas en el marco de la clausura del Congreso anual de Aecoc, ha precisado que una de sus grandes preocupaciones es comprobar cuáles son "los beneficios reales de los productos que adquiere", sin dejarse llevar tanto por la imagen de marca.
Además, también se observa que se trata de un grupo de población "que ha aprendido a través de sus padres a ser más racional, a no vivir por encima de posibilidades" tras vivir la reciente crisis económica.
Este tipo de consumidor también dice darle una especial importancia "a asuntos como la sostenibilidad, el desperdicio alimentario y lo saludable", priorizando los alimentos elaborados con "ingredientes naturales, sin azúcar añadido y sin aditivos ni conservantes", valora los productos "de proximidad".