Joaquín Guzmán - Crítica
Adaptarse a las circunstancias
«Così fan tutte es una agradable ópera escenificada con los medios justos para salir del paso»
![Joaquín Guzmán: Adaptarse a las circunstancias](https://s2.abcstatics.com/media/espana/2020/10/05/cosi-fan-tutte-kN4D--1248x698@abc.jpg)
Es difícil no sentir cierta emoción ante la vuelta al Palau de Les Arts, para poder disfrutar, de nuevo, de representaciones operísticas, en medio de la vorágine que supone todo esto que nos está pasando y que sobradamente conocen. No detallaré las medidas de seguridad que se han adoptado, pero mi impresión fue de una perfecta organización y de un mínimo riesgo para el público . Así que primera ópera de una temporada que quedará anotada en la crónica que se escriba del teatro como la de la pandemia.
La programación debió iniciarse con un Requiem mozartiano que no ha podido ponerse en liza, desgraciadamente, así que ha sido este Così fan tutte el que ha tenido el honor de abrir las representaciones, que esperamos transcurran con normalidad durante todos estos meses.
Comenzando con la dirección de escena, firmada por Silvia Costa, no acabo de comprender porqué se dice que es «semiescenificada» ; las óperas son escenificadas o en versión concierto, es decir no escenificadas. El caso es que en este teatro hemos podido disfrutar y también sufrir algunas «escenas» de renombrados registas, con una economía de medios que no se alejaba mucho de este Così.
Recuerdo una prescindible Carmen firmada hace tiempo por Carlos Saura, o un lamentable Don Giovanni a cargo Jonathan Miller. En esta ocasión hemos asistido a una obra escenificada, aunque con los medios justos para salir del paso , dado también el poco tiempo del que se dispuso. No sería justo, por tanto, valorar la representación con la medida que se emplea para las producciones habituales por presupuesto y tiempo, por lo que no tendremos en cuenta cierta falta de imaginación en resolver distintas escenas, así como un excesivo hieratismo de todos los intervinientes y cierta sensación de modesto teatro por ejemplo en un vestuario olvidable .
En cuanto al movimiento de actores, una vez más se cae en algo que últimamente observo con demasiada frecuencia en los directores de escena y que a mí particularmente me remueve en mi asiento, como es la de obligar a moverse como autómatas a los cantantes al ritmo de la música en los números de conjunto con gestos bastante crípticos por inexplicables . Así cuando el tempo es presto los movimientos corporales son rápidos, y en un pasaje o aria en adagio inician una suerte de mímica a cámara lenta que me parece de dudoso gusto y fuera de lugar.
![Imagen de «Così fan tutte» en el Palau de les Arts de Valencia](https://s3.abcstatics.com/media/espana/2020/10/05/cosi-fan-tutte-kkCB--510x349@abc.jpg)
En el terreno musical el director italiano Stefano Montanari lleva a cabo una excelente lectura de la genial partitura. Una lectura volcada más en la intensidad y frescura , empleando unos tempi muy veloces, que en el refinamiento más hedonista. Visualmente el director de Rávena está plagado de particularidades poco hortodoxas que no seré yo quien cuestione, porque pienso que esto de la música no va de qué hace con la batuta cuando no la emplea y se pone al frente del clave en los recitativos o de las pintas que nos lleva, pues son cuestiones que a mí particularmente me dan igual mientras no afecten a mi disfrute.
La ópera ha dejado, hace tiempo de ser un espacio de formalidades instauradas décadas, sino, siglos atrás. La intensidad impuesta no le hizo perder el control en momento alguno de foso y escenario, puesto que para ello cuenta con un instrumento infalible como es la Orquesta de la Comunitat Valenciana , que sonó excelentemente.
De hecho, lo hizo mucho mejor que en su primer acercamiento a esta partitura en plena «época dorada» pero teniendo enfrente a un director ineficaz. Excelentes todas las familias y solistas, pero me quedaré en esta ocasión con las maderas. Una de las sorpresas más agradables de la velada fue ver en el atril del oboe a Christopher Bowman, excelente músico que pensaba que había abandonado la formación. Los recitativos fueron acompañados al clave por el propio director que mostró un dominio absoluto en el terreno de la improvisación.
El nivel vocal de la representación fue en general alto. Debemos destacar a la soprano italiana Federica Lombardi, como Fiordiligi, que fue la más aplaudida de la velada junto a Marina Monzó, una cantante, la italiana, que es ya una realidad en lo más alto de la escena internacional. Lombardi junto con la irlandesa Paula Murrihi bordaron sus papeles cantados con todo el estilo mozartiano. Marina Monzó (sacrificada en una de sus arias por los cortes), fue una Despina fabulosa, voz de una perfecta afinación y un fraseo adecuadísimo y de exquisito gusto. La caricatura que hizo del notario fue inolvidable.
Además, hay que decirlo, fue quien con más gracia se desenvolvió sobre las tablas de todos los comparecientes. Sin duda estamos ante una de las voces del más inmediato futuro del panorama español . De entre los hombres destacó por encima del terceto el barítono Davide Luciano que lució sobrados medios sin perder la elegante línea en todo momento además de un bonito timbre. Algunos pasos por detrás quedó el tenor Anicio Zorzi que sin tener una noche aciaga su voz no corrió por la sala, quizás por faltarle empuje y ser demasiado ligera y entubada. Finalmente, Mahuel Di Piero fue un correcto Don Alfonso más convincente si cabe en sus recitativos. El coro, que tuvo que luchar contra los elementos (recortes y posición en el escenario) estuvo en su línea de excelencia.
En definitiva, una agradable noche de ópera escenificada , aunque eso sí, recortada en la duración una media hora para cumplir medidas, cortes que, sin embargo, no perjudicaron la trama del magistral libreto de Lorenzo Da Ponte.
Così fan tutte
Drama jocoso en dos actos de W.A. Mozart
Palau de les Arts de Valencia
30 de octubre de 2020
Federica Lombardi, Paula Murrihy, Marina Monzó, Anicio Zorzi Giustiniani, Davide Luciano, Nahuel Di Pierro.
Orquesta de la Comunitat Valenciana
Dirección musical: Stefano Montanari
Dirección escécnica: Silvia Costa