Entrevista
Eusebio Monzó: «Si gobernamos revertiremos el caos circulatorio de Valencia que ha provocado Grezzi»
El portavoz del PP en el Ayuntamiento admite que la inversión del Gobierno central en transporte metropolitano debería mejorar
Suena como uno de los posibles alcaldables del PP en Valencia y se encuentra en plena sintonía con la líder regional del partido, Isabel Bonig. A la espera de que se lance el candidato (parece que los plazos, como publicó ABC, se retrasan hasta a partir de septiembre) , la dirección quiere reforzar la figura de Eusebio Monzó como referente para tratar de contrarrestar a Ciudadanos y conseguir colocar el mensaje entre un electorado por el que compiten. El portavoz popular en el Ayuntamiento de la ciudad aprovecha para empezar a transmitir promesas electorales a poco más de un año de los comicios municipales.
¿Le parecen suficientes las inversiones del Gobierno central en Valencia? ¿Comparte las reivindicaciones de los alcaldes?
Creo que los Presupuestos Generales del Estado hay que analizarlos de una forma global y no centrarse sólo en el aspecto de inversiones. 7 de cada 10 euros son para gasto social, hay un aumento en el gasto en pensiones, en el sueldo de funcionarios, mejoras con las bajas por paternidad y maternidad e incremento en las comunidades autónomas superior a 4.000 millones de euros. Para conseguir todo esto ha habido que trabajar mucho para que la situación económica se recuperara. En cuanto a las inversiones, es legítimo reivindicar mejoras para tu comunidad o para tu ciudad, pero hay que hacerlo en los ámbitos que corresponde: Congreso, Federación de Municipios y Provincias, etc. Me gustaría saber por qué Joan Ribó antes de ir a Madrid no ha pasado por el Palau de la Generalitat y le ha preguntado al señor Ximo Puig por qué en tres años se han reducido las inversiones en la ciudad de Valencia en un 36%. Actualmente invierten sólo 20 millones de euros, cuando ha habido legislaturas del PP en las que se han sobrepasado los 500 millones de inversión para construcción de colegios, para poner en marcha La Fe, para la Ciudad de las Artes, para hacer colectores... Ahora que Puig rebaja las inversiones, se va el alcalde a hacerse una foto a Madrid. Me parece irresponsable.
¿No cree que el Ejecutivo central debería aumentar la inversión en el transporte metropolitano?
Creo que debe de mejorarse. Lo que pasa es que hay que entender que esa es una negociación a tres bandas que afecta al Estado, a la Generalitat y al municipio de Valencia. De poco sirven las reivindicaciones sin diálogo, y no existe porque a Ribó no le interesa que se solucionen los verdaderos problemas de la ciudad sino montar lío.
¿Cómo valora las inversiones del Ayuntamiento?
Gracias a las medidas del PP en el Gobierno de España, el Consistorio ha mejorado sus ingresos en tres años en 70 millones de euros. En capítulo de inversiones, sólo en 2017 tenía la oportunidad de invertir 150 millones y no se ha alcanzado ni el 53%. Es otro de los motivos por los que la reivindicación de Ribó es injustificada. Que se centre primero en gestionar los recursos que tiene con un remanente de tesorería de más de 60 millones.
¿Qué opina de que València en Comú no vea con buenos ojos grandes proyectos como el hotel de La Marina, el pabellón de Juan Roig o las torres del Parque Central?
El problema no es que a ellos no les guste, porque entra dentro de su programa, sino que el PSPV y Compromís necesiten sus apoyos para sacarlo adelante. Por ese motivo están paralizados estos proyectos. Es una pena que se puedan generar ingresos, por ejemplo en la Marina, para compensar parte de la deuda y que lo tengan parado. También ocurre en el Parque Central, donde VeC ha puesto en duda la edificabilidad del canal de acceso. Hay una inversión importantísima del Estado a la que el Ayuntamiento no ha respondido. En la V-21 llegaron a paralizar que se sacara la licitación y este año hay cuatro millones de euros en los PGE gracias al empeño del ministro De la Serna. El lastre no es València en Comú, es el propio gobierno.
¿Se atreve a lanzar alguna promesa electoral si vuelven a gobernar?
Revertiremos el caos circulatorio de Valencia que el concejal Grezzi ha provocado con medidas sin ningún tipo de consenso. Revisaremos, en concreto, la calle Colón como arteria comercial principal de la ciudad.
¿Eso quiere decir que revisarán el carril bici?
El PP fue el que más carril bici por kilómetro cuadrado en una ciudad tenía proyectado. Eso lo consiguió Rita Barberá, no nos hemos opuesto nunca a que Valencia tenga carril bici. Es un aspecto de futuro, pero hay que hacerlo de forma ordenada, consensuada y proporcionada. En Colón hay un caos circulatorio y es evidente.
¿Pero eso en qué se concreta?
Eliminar poder aparcar en el carril bus fue desde nuestro punto de vista un error.
¿Entonces se podrá volver a aparcar en el carril bus si gobiernan?
Lo que haremos es hablar con todos los afectados, tanto con el mundo de la restauración como con taxistas y usuarios para tratar de revertir esa situación.
¿Descartarían algún proyecto de peatonalización de los que ha impulsado el Ayuntamiento?
Nunca hemos estado contra la peatonalización de zonas. Los grandes proyectos en este sentido fueron impulsados por el PP. Pero una vez más hay que hacerlo bien y no impedir que los vecinos del centro histórico puedan acceder a sus propios aparcamientos. La peatonalización de Ribó es a base de maceteros y no es correcto. Te puedes plantear hacerlo en zonas como la Lonja, los Santos Juanes o incluso la plaza del Ayuntamiento, pero sin eliminar el tráfico para que los vecinos puedan entrar, y de forma coherente y sensata.
¿También en el caso de la plaza de la Reina?
Sí. He escuchado decir que se quiere peatonalizar la calle de la Paz hasta Poeta Querol. Insisto en lo mismo, no se puede hacer total. La gente que quiere entrar a sus viviendas tendrá que poder.
Es decir, mantendrían los proyectos pero revisarían el modo de ejecutarlos.
Lo que queremos es avanzar hacia una ciudad que sea sostenible, ordenada, eficiente, pero no de la forma caótica en la que se está haciendo hasta el momento. Lo revisaremos todo.
¿Qué harían con el Cabanyal?
La pregunta es qué haría el Gobierno actual, porque no ha hecho nada. El PP en el primer pleno de 2015 hizo una propuesta de reducir a la mitad el ancho de la ampliación, de reducir de cinco a tres alturas la edificabilidad y de respetar los BICs del barrio. Han pasado tres años y el Gobierno de Ribó ha fallado a los vecinos y cuando han presentado un proyecto con 1.500 viviendas, muchas de ellas VPO, les han dicho que no era lo que querían. Lo que no pueden es tener un barrio, con el que han sido absolutamente beligerantes, paralizado, con los precios subiendo un 50% y con un aumento de los desahucios. Es lo que ha conseguido el Gobierno de Ribó y con Ciudadanos cómplice tras hacerse la foto con ellos en 2015.
¿Bajarán los impuestos si llegan al Consistorio?
Sí. Bonificaremos hasta un 50% las plusvalías por fallecimiento y bajaremos el IBI un 3% con carácter general.
¿Salvaría algo de la gestión del tripartito?
Es difícil. He asistido a algún curso de formación para altos cargos que me ha parecido positivo. Pero incluso la gestión de personal ha sido nefasta. Hay un gasto anual de más de 40 millones de euros y sin embargo no hay más gente trabajando. Esta situación es especialmente sensible en policías y bomberos donde además la plantilla se ha reducido.
¿Comparte la visión de que Ribó tampoco ha salido tan trasquilado de esta legislatura?
Ribó está parado. Llegó a ser alcalde cuando creo que esa posibilidad no estaría ni en sus mejores sueños y a partir de ahí no ha hecho nada quitando de intentar apagar los fuegos de sus concejales como Fuset o Grezzi. En el último Consejo Social no paraba de pedirle calma a Grezzi, supongo que porque ve que va de cara a unas elecciones y que no le interesa su agresividad.
Se lo decía sobre todo porque al no estar tan quemado puede suponer que Compromís no pierda tantos votos como creen.
Pero hay que recordar que Ribó ha impedido que la Senyera entre en la Catedral, ha puesto una bandera republicana en el balcón, ha dado más de 150.000 euros a entidades catalanistas. Detrás de todo eso está él, otra cosa es que lance a sus concejales para quemarse lo mínimo posible. El mayor problema del actual Gobierno es la parálisis generalizada. Hay más de mil expedientes de licencias a la espera de que sean concedidas. No se es capaz de atraer ningún tipo de inversión y no se consigue la confianza ni tienen claro el modelo de ciudad. Si a eso le llama no estar quemado, bueno. Pero lo peor para un gobernante es pasar inadvertido.
