Política
El desacuerdo entre los grupos aplaza la reforma de la Sindicatura de Cuentas y la delimitación comarcal
Las discrepancias en Compromís y la salida de diputados de Ciudadanos provocan el retraso de las iniciativas parlamentarias
El último pleno de las Cortes Valencianas antes de las vacaciones de verano se ha celebrado sin cumplirse con dos de los puntos previstos. Éstos incluían votaciones que finalmente se han eliminado del orden del día por falta de acuerdo entre los grupos : la reforma de la Ley de la Sindicatura de Comptes y la delimitación comarcal.
La primera es una iniciativa de Podemos que lleva 17 meses tramitándose. Su portavoz, Antonio Montiel, ha explicado que los cuatro partidos «más interesados» en esta cuestión (menos el PP) han acordado ampliar el plazo para seguir negociando transacciones. La norma, con enmiendas incorporadas, fue aprobada en comisión a finales del mes pasado y sólo faltaba debatir en pleno las enmiendas que aún quedaban «vivas» para su luz verde definitiva.
El aplazamiento se ha pedido, ha dicho, para seguir negociando sobre esos textos pendientes y también para abordar el acuerdo del pasado 21 de junio de todos los tribunales de cuentas con propuestas a las comunidades para agilizar la rendición de cuentas de las entidades locales, aumentando las acciones coercitivas.
La reforma de la sindicatura ha encontrado durante estos meses reticencias dentro de los grupos que sustentan el Consell, que la han modificado sustancialmente respecto a la primera propuesta que se presentó. Tanto PSPV como Compromís han diferido desde el principio de determinadas competencias que se incluían para este órgano, como la potestad sancionadora (algo que ya ocurrió con la Agencia Antifraude). Finalmente, y tras las negociaciones, podrá imponer multas coercitivas a personas físicas o jurídicas cuando se incumple el deber de colaboración o de rendición de cuentas. La primera de hasta 300 euros y con un máximo de 3.000 si fuese reincidente.
Tampoco veían con buenos ojos la enmienda viva de Podemos en la que se proponía reprobar al síndic sin que hubiera finalizado su mandato . Ésta no se había conseguido pactar previamente, por lo que ahora se tratará de negociar.
Otro de los problemas que han surgido para la votación de la reforma este miércoles ha sido la situación inusual que vive Ciudadanos . Tras la salida de cuatro de sus trece diputados, el grupo ha quedado reducido en número y ha tenido que reorganizar sus responsabilidades respecto a los temas que lleva cada uno. Según fuentes parlamentarias, registraron las enmiendas transaccionales a última hora y pidieron retrasar el debate sobre esta cuestión para poder estudiar toda la documentación de forma más exhaustiva.
Sin Ciudadanos, el tripartito no llegaba a los tres quintos (60 votos) requeridos para que la reforma de la Sindicatura saliera adelante, un motivo más para que decidieran posponerla.
Desde Compromís, el diputado Jordi Juan ha defendido que en una ley «importantísima» como esta lo fundamental es «la calidad y no las prisas» y ha remarcado que la propia Sindicatura ha realizado nuevas aportaciones que hay que sentarse a valorar «con tranquilidad» porque, además, «no hay necesidad imperiosa de que entre hoy en el ordenamiento».
Las explicaciones públicas no han convencido al PP. «Que no les engañen, se retira porque no tienen los tres quintos. Y eso a pesar de los cuatro ex de Ciudadanos, si de aquí a septiembre alguno más abandona. Ya está bien de trilerismo político, si en esto consiste la nueva política yo me bajo», ha afirmado la portavoz popular, Isabel Bonig.
Ley de comarcalización
La proposición de ley sobre delimitación comarcal que este miércoles tenía que tomarse en consideración ha sido otro de los puntos de fricción de la jornada por falta de acuerdo. El diputado de Compromís (partido que la presentaba) Paco García ha negado que ésta fuera la causa, sino que la razón es la intención de conseguir la «máxima participación de las entidades locales» y este momento, «no es la mejor fórmula» porque muchos consistorios ya no celebrarán plenos hasta la vuelta de vacaciones. No obstante, ha asegurado que en septiembre volver a debatirse su entrada en las Corts y ha recordado que cuenta con el criterio favorable del Consell.
La norma, sin embargo, parece haber generado discrepancias entre Iniciativa y el Bloc , dos de los partidos que componen Compromís. Ésta incluye cambios de capitalidad en las comarcas y nuevas divisiones -como por ejemplo en l'Horta- que han generado descontento en los alcaldes de varias localidades. Tampoco convence al Bloc, que además cuenta con su mayor estructura política a nivel municipal.