Coronavirus
Los chinos católicos de Valencia donan a hospitales más de 40.000 mascarillas
Los equipos de protección han sido adquiridos con donativos y colectas del colectivo en la ciudad
Última hora del coronavirus en la Comunidad Valenciana
La comunidad de católicos chinos de Valencia, que cuenta con una “parroquia personal” bajo la advocación de Nuestra Señora de Sheshan, en el templo de Santa María Goretti , en la Gran Vía Germanías, ha donado más de 40.000 mascarillas a hospitales y centros de salud valencianos, compradas mediante donativos y “generosas colectas” que ha impulsado desde que fue decretado el estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus .
Así, desde la parroquia, en colaboración con la Asociación de empresarios chinos de Fujian en Españ a, se han entregado en total más de 40.000 mascarillas al Hospital General de Valencia, al Hospital Doctor Peset y al centro de salud de Torrent, a la Guardia Civil, Policía Nacional y Local, además de 4.000 al Arzobispado de Valencia, y están a la espera de recibir más material, como 600 trajes de protección y guantes, procedente de China.
Igualmente, tienen previsto próximamente realizar otra entrega de ayuda, que incluirá también alimentos, a Cáritas Valencia.
Según el sacerdote chino Esteban Liu , párroco de la parroquia Nuestra Señora de Sheshan, la feligresía “está respondiendo con enorme generosidad y caridad para hacer frente a esta situación de dificultad y con mucha responsabilidad desde un principio para evitar los contagios”.
“Nuestros vecinos y feligreses, la gran mayoría propietarios de comercios en el barrio - tiendas, bares, restaurantes - están perdiendo sus trabajos, y trasladan su preocupación ante un futuro incierto, porque no saben cuándo podrán abrir de nuevo y cuándo podrán recuperar lo perdido”, ha añadido Esteban Liu. No obstante, su generosidad aumenta en estos momentos.
Las noticias que llegan desde China, de muchos de sus familiares, es de “extremar la precaución y el cuidado” aunque en medio de la preocupación empiezan a vislumbrar esperanza “porque les transmiten desde allí que ya están empezando a retomar la vida con cierta normalidad”.
Precisamente, junto con las dos religiosas chinas que colaboran con la parroquia , Antonia y Marina , el sacerdote chino está realizando a través de internet “acompañamiento espiritual” a los feligreses “que en estos tiempos lo pasan mal”. “Les animo desde la fe, a que confíen en Dios, porque Él está a nuestro lado, y a que aprovechen este tiempo largo de confinamiento para convivir y conocer mejor a Jesús y nuestros familiares”. “Es un tiempo de gracia, una oportunidad para mirar a Jesús” y “la Palabra de Dios puede orientar sus vidas, abriendo nuevos horizontes”, asegura.