Alberto Caparrós - CRÓNICAS SABÁTICAS
Cabanyal-Canyamelar: tres años, dos meses y quince días después
«Por donde hace tres años se manifestaron miles de personas, ahora apenas se concentran trescientas»
Cabanyal-Canyamelar (Valencia). 6 de abril de 2014. Ximo Puig , hoy presidente de la Generalitat, y Enric Morera , actual presidente de las Cortes Valencianas, se suman a una manifestación convocada por Salvem el Cabanyal para clamar contra la «degradación» del barrio y reclamar «un plan de futuro para el barrio consensuado con vecinos y comerciantes». Era domingo y miles de personas acudieron a la convocatoria. La entonces portavoz de Salvem el Cabanyal, Maribel Doménech , enfatiza que los dirigentes de Compromís y del PSPV «toda la vida nos han dado apoyo», por lo que expresó su confianza respecto a que «si alguna vez llegan al poder, realmente se acuerden del compromiso que han tenido con nosotros». «Yo creo que lo van a tener», aseveró.
Cabanyal-Canyamelar (Valencia). 21 de junio de 2017. Es miércoles por la tarde y en el cruce de las calles de la Reina y Mediterráneo, por donde hace tres años se manifestaron miles de personas, apenas se concentran trescientas. Solo hay dos políticos. Antonio Montiel , portavoz de Podemos en las Cortes Valencianas, y Jaume Hurtado , presidente de Som Valencians. El resto son vecinos. En 2014, un hombre que luego formó parte de la candidatura del PSPV a las Cortes Valencianas aunque no logró escaño preguntaba que cómo se «sale de aquí».
De PSPV y Compromís, este miércoles no había ya ni rastro. Maribel Doménech ya no ejerce de portavoz de Salvem el Cabanyal, pero está presente. La plataforma convoca una concentración con el apoyo de otras siete entidades. La Junta Mayor de la Semana Santa Marinera está entre ellas, pero no acuden ni su presidente ni su secretario general. Sí lo hace el presidente de la agrupación de fallas del Marítimo y el de los vendedores del Mercado del Cabanyal. Faustino Villora , líder histórico de Salvem el Cabanyal, toma la palabra con un mensaje dirigido a las Administraciones local, autonómica y central. Exige una intervención «urgente para recuperar la vida digna en el barrio» . Un mensaje compartido por todos los vecinos: los pocos que hemos bajado a la calle y la mayoría que se han quedado en su casa. A la próxima, nos dicen, deberíamos ser más: «el triple».
Tres años, dos meses y quince días después la vida sigue igual o peor en el Cabanyal-Canyamelar.