Burjassot
Arriesga la vida por defender a su compañera de piso cuando su expareja la iba a acuchillar
El hombre con su mujer y su hijo de tres años se han refugiado en una habitación con la víctima y el agresor clavaba sus armas en la puerta
![Efectivos de la Policía Nacional en Valencia](https://s2.abcstatics.com/media/espana/2019/06/11/policia-nacional-grupo-kMZD--1248x698@abc.jpg)
Un hombre ha arriesgado su vida por defender a su compañera de piso cuando su expareja la amenazaba con varios cuchillos , momento en el que el agresor se ha encarado con él y han tenido que refugiarse ambos -junto con la mujer y un hijo de tres años- en otra habitación, donde ha seguido la situación de violencia y el atacante ha clavado sus armas con insistencia tratando de entrar.
Los vecinos han dado la voz de alerta y el presunto agresor, de 37 años de edad, ha sido detenido en Burjassot (Valencia) por quebrantar una orden de alejamiento de su expareja y por estas amenazas a ella y a sus compañeros de piso con varios cuchillos, según ha informado la Policía Nacional .
El arrestado mostró una gran resistencia a la detención e incluso mordió a uno de los agentes.
Al parecer, el sospechoso residía con su pareja en un domicilio que comparten con un matrimonio, pero tenía una orden de alejamiento en vigor.
El incidente se produjo cuando el hombre llegó a su domicilio de madrugada, agredió a su pareja y su compañero de piso intervino para tratar de detenerle, momento en el que el detenido le amenazó con una navaja y un cuchillo.
Para evitar ser lesionados, tanto el compañero de piso como su mujer e hijo de tres años, como la pareja del ahora detenido y el hijo menor de esta, se encerraron en una habitación del domicilio.
El presunto autor habría propinado golpes a la puerta con el cuchillo, intentando acceder al interior, mientras amenazaba a todos con matarlos, han informado las mismas fuentes.
Los propios vecinos alertaron a la Policía cuando el sospechoso, al no poder acceder a la habitación, supuestamente salió a la calle con el cuchillo en la mano, amenazando a voces al compañero de piso que había intercedido.