Caso Mediador
Las claves del 'caso Mediador', la trama criminal por la que han detenido al diputado del PSOE Juan Bernardo Fuentes
El 'Tito Berni', como era apodado en la trama, está acusado de ofrecer a empresarios distintos tratos de favor a cambio de mordidas
Los audios que acorralan al diputado socialista
Billetes de 200 y fotos en burdeles: así funcionaba la organización de 'Tito Berni'
La Policía detuvo este lunes al diputado del PSOE Juan Bernardo Fuentes por su implicación en el 'caso Mediador', la trama de mordidas en Canarias por la que dimitió hace apenas una semana, al verse acorralado tras la detención de su sobrino, Taishet Fuentes, que le sustituyó como director general de Ganadería del Gobierno canario cuando se fue al Congreso.
La titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Santa Cruz de Tenerife sitúa al ya exparlamentario canario, apodado como 'Tito Berni', en el «vértice superior de una trama criminal perfectamente definida y coordinada» que ofrecía a empresarios distintos tratos de favor a cambio de mordidas.
Cómo empezó todo
La causa arrancó, como reveló ABC, con la detención de Antonio Navarro Tacoronte hace poco más de un año. Un empresario le señaló por estafa tras cargar gastos a su cuenta bancaria sin autorización y no dudó en entregar sus móviles a la Policía para tirar del hilo y llegar a un acuerdo.
El hilo fue largo: sólo en uno de los dispositivos había 60 gigabytes de archivos, incluido el material que acabaría alcanzando al diputado Fuentes Curbelo y los principales protagonistas de la trama. La tesis es que hasta siete empresarios tanto de las islas como la península habrían pagado mordidas y regalos a cambio de un despliegue de influencias que les abriría mercado.
Sin embargo, tras reconocer todos ellos los hechos a la Policía, ninguno ve delitos de cohecho pese a los regalos que había entre medias y se consideran víctimas de una estafa dado que nunca llegaban a materializarse las promesas de Navarro.
Principales implicados
Por el momento hay 12 investigados por delitos de pertenencia a organización criminal, cohecho, tráfico de influencias, blanqueo de capitales y falsedad documental por hechos que se remontan a 2020 y 2021. Se trata de «personas de extraordinaria importancia para el desarrollo de la trama criminal». Estos son los principales:

Antonio Navarro Tacoronte
Su confesión y la gran cantidad de archivos gráficos y sonoros ha servido para destapar el caso. Su labor de enlace entre empresarios y políticos ha dado nombre al caso Mediador. Entre el material incautado hay más de 30.000 audios, algunos de hasta 15 horas de grabación, almacenados con etiquetas como «brutal».

Juan Bernardo Fuentes
Diputado del PSOE por Canarias y considerado en la investigación como «vértice superior de la trama criminal». La Guardia Civil apunta que usaba la Cámara Baja para ganarse a empresarios.

Taishet Fuentes
Junto al exdiputado socialista, la magistrada sitúa en lo más alto de la presunta organización a su sobrino Taishet Fuentes, hasta el año pasado director general de Ganadería en el gobierno canario.

Francisco Espinosa Navas
General de la Guardia Civil ya retirado, completa la lista de principales investigados. Él se encuentra en prisión provisional desde hace dos días.
La Guardia Civil apunta que el exdiputado socialista usaba la Cámara Baja para ganarse a empresarios. Los llevaba al Congreso y a dar una vuelta por el Palacio Real para ganarse su confianza y luego a almorzar y seguir de fiesta el resto del día. Pagaba el empresario en cuestión: «Entre 3.000 o 3.500 euros de media por noche», según la documentación del caso a la que tuvo acceso este diario. Después, acababan en un conocido club de alterne de la capital.
Según el mediador, que ha declarado hasta tres veces en sede judicial, tenía un contacto en Madrid que le conseguía de todo, «incluso traslados». En el Congreso ya eran recibidos por el diputado socialista, que se encargaba de las fiestas.
Como el propio Navarro llegó a reconocer en un audio, las fiestas y las «putas» era un peaje a pagar para recibir favores. «Esto no es delito -llegó a decir-, pero estamos sobornando».