Torra intenta sembrar dudas sobre la imparcialidad del tribunal que le juzgará por su desafío con los lazos
«La justicia es lenta solo cuando quiere», dice el presidente de la Generaliatat al saberse que se sentará en el banquillo el 25 y 26 de septiembre

Nada más conocerse la fecha del juicio, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha comenzado a sembrar dudas sobre la imparcialidad del tribunal que lo juzgará por su desafío con los símbolos partidistas en periodo electoral.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) la mañana de este lunes ha fechado para los días 25 y 26 de septiembre la vista oral contra Quim Torra por un supuesto delito de desobediencia, en el que se enfrentará a una pena de inhabilitación temporal para ejercer cargos públicos.
A primera hora de este lunes, su oficina de prensa ha considerado que se trata de un «señalamiento marcadamente precipitado» , considerando que la justicia «es lenta solo cuando quiere». «Podemos comprobar como la prisa del tribunal por resolver el caso del president Torra es absoluta», considera el comunicado.
Argumentan también que el auto que acuerda la fecha del juicio está datado el 31 de julio (aunque se ha notificado este lunes). Esto es, una fecha previa al auto en el que el TSJC resuelve sobre las pruebas que las partes pidieron llevar al juicio, con fecha de 2 de septiembre.
Según la Generalitat, este hecho es contrario a la Ley de Enjuiciamiento Criminal. «Los jueces y tribunales no solo han de ser imparciales, sino que también deben parecerlo». Por eso aseguran que ejercerán las acciones legales pertinentes.