Miquel Porta Perales - El oasis catalán
Tiempo
«De momento, se trata de enfriar la cosa y evitar unas elecciones generales avanzadas que no interesan ni al PSOE ni a Pedro Sánchez»
Ganar tiempo, eso es lo que buscan Pedro Sánchez y Joaquim Torra en su encuentro en La Moncloa. El primero, quiere acabar los dos años que restan de legislatura y para eso necesita el apoyo de los secesionistas y sus adláteres en el Congreso de los Diputados.
El segundo, necesita alargar la agonía del «proceso» para salvar su reputación -se trata de una manera de hablar- y dar un poco de oxígeno al fundamentalismo independentista encarnado por Carles Puigdemont y su círculo integrista, la CUP, la ANC, Òmnium Cultural y la prensa amiga que acompaña al secesionismo hasta el descalabro final.
Más: la firmeza -real o supuesta- de Joaquim Torra pretende disimular -no lo consigue- la división entre nacionalistas al tiempo que brinda alguna vitamina a una masa separatista en estado de flacidez.
Pedro Sánchez no lo tiene fácil. ¿Cómo dialogar con quien insiste en la descalificación del Rey, en la insoportable pesadez del 1 de Octubre, en el supuesto mandato democrático republicano, en un derecho de autodeterminación que no existe y en los «presos políticos» y «exiliados»? Pedro Sánchez ha dicho «no» a la autodeterminación de Cataluña y anuncia la implementación de las comisiones mixtas entre el Estado y la Generalitat.
De momento, se trata de enfriar la cosa y evitar unas elecciones generales avanzadas que no interesan ni al PSOE ni a Pedro Sánchez. Por eso, lo mejor de la reunión de La Moncloa -lo mejor para Pedro Sánchez y Joaquim Torra- es el anuncio de otro encuentro en otoño. Mientras tanto, Joaquim Torra y la alegre muchachada separatista tensionarán el ambiente, crearán falsas expectativas y desafiarán al Estado con la intención de sacar alguna tajada. Ganar tiempo, decía. ¿Para qué? Muy probablemente, para nada. El tiempo como placebo.
DRAE: «Sustancia que, careciendo por sí misma de acción terapéutica, produce algún efecto favorable en el enfermo, si este la recibe convencido de que esa sustancia posee realmente tal acción». En resumen: ganar tiempo para perder tiempo.