Puigdemont avala la mesa de Sánchez y pide a ERC consensuar la estrategia de negociación
El expresidente fugado ningunea a Quim Torra, que hace dos días desdeñó el diálogo con el Gobierno
El expresidente catalán Carles Puigdemont quiere que se escuche su voz en la mesa de negociación pactada por ERC y el PSOE como condición para la investidura de Pedro Sánchez. Como primer paso, ha avalado este órgano y ha pedido que el independentismo se organice para llevar una lista de reclamaciones consensuada al encuentro con el Gobierno. Con este paso, el líder independentista fugado en Bélgica desautoriza a Quim Torra y a parte de su partido, que lleva días criticando el acuerdo y desdeñando la utilidad de la mesa de diálogo Estado-Generalitat.
«Todo mi respeto al acuerdo al que han llegado ERC y PSOE », ha apuntado Puigdemont en una extensa retahíla de mensajes publicados en su perfil de Twitter en los que también ha reclamado que no se cargue contra quienes han recibido el pacto entre socialistas y republicanos «con reservas». «No somos menos maduros ni menos dialogantes debido a que pensamos que los acuerdos con nuestros represores deben poder ser planificados y trabajados conjuntamente», ha resaltado.
Sin embargo, el expresidente ha tendido la mano a ERC para que le hagan un hueco en esta previa a la «mesa de negociación» que, según se conoció ayer, se establecerá quince días después de la investidura de Pedro Sánchez . Así, Puigdemont propone la creación de una mesa entre las fuerzas independentistas donde se decidan el contenido y los acuerdos de la mesa de negociación con el Estado. «Es por donde teníamos que haber comenzado», ha aseverado.
¿Puigdemont en la mesa de Sánchez?
«Hasta ahora, las etapas decisivas del proceso de independencia habían sido compartidas y decididas en medio de un consenso muy amplio», ha agregado el expresidente sin detallar si a él le gustaría participar en las negociaciones . No en vano, el acuerdo ERC-PSOE resalta que no impondrán vetos en los miembros que participen en la mesa por cada parte. «Lo que nos conviene es tener un espacio compartido», se ha limitado a indicar Puigdemont sin concretar qué partidos o entidades deberían preparar el encuentro con el Gobierno.
Con este paso, el exalcalde de Gerona desautoriza al presidente de la Generalitat, Quim Torra , que lleva dos días criticando el pacto entre republicanos y socialistas asegurando que el gobierno catalán no lo siente como propio por ser un acuerdo «entre partidos» que no incorpora reclamaciones centrales del soberanismo como la libertad para los presos del 1-O. También, varios dirigentes de Junts per Catalunya -el partido de Torra y Puigdemont- llevan horas cargando contra ERC por llegar a un acuerdo con el PSOE que pasa de lado por temas que consideran «centrales» del independentismo como la «amnistía» o la celebración de un referéndum de secesión.
Noticias relacionadas