El independentismo intensifica su campaña de denuncia antes del juicio por el 1-O

Entidades y partidos independentistas se han desplazado este viernes hasta la prisión de Can Brians para denunciar el inicio inminente del juicio por el 1-O, proceso que juzgará a los dirigentes secesionistas responsables de la organización y celebración del referéndum ilegal de 2017. Lo han hecho coincidiendo con el traslado de los 9 independentistas presos a Madrid , operación que se ha realizado esta mañana entre protestas y medidas de seguridad.

La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, y el vocal de la junta directiva de Òmnium Cultural Ignasi Termes han afirmado que los presos independentistas «no están solos», sino que forman parte de una «lucha colectiva» en lo que consideran una «causa general» contra todo el soberanismo. Paluzie ha llamado al independentismo a convertir el juicio en «un bumerán contra el Estado» , ya que el mismo, a su parecer, es «una causa general contra la autodeterminación». Para la presidenta de la Assemblea, este debería haberse anulado. Por su parte, el portavoz de Òmnium ha acusado al Estado de organizar «un tribunal de excepción que pone en riesgo derechos fundamentales básicos».

Desde las formacones independentistas el mensaje ha sido similar. A las puertas de Can Brians, el portavoz de Junts per Catalunya, Albert Batet, ha asegurado que el juicio del proceso independentista que se llevará a cabo en el Supremo es un «juicio político» por lo que «la única sentencia posible es la absolución de los presos y el retorno de los exiliados». Asimismo, la portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha afirmado que los presos soberanistas representan la «dignidad de todo un pueblo», y ha avisado al Estado de que están sentando en el banquillo de los acusados «a todos» los catalanes que quieren decidir su futuro y a «todos los demócratas».