incertumbre en el segriá
El confinamiento frustrado hunde a Lérida en la confusión
Comerciantes y vecinos, desconcertados después de que un juzgado tumbase la orden de la Generalitat
«Me parece un desbarajuste todo lo que está pasando, ya no sabemos cómo actuar, ni qué hacer ». Las declaraciones del presidente de la Federación de Hostelería de Lérida, Josep Castellarnau, resumen el sentimiento de comerciantes y vecinos de la comarca del Segriá, sumergidos en la confusión después de que la Generalitat ordenase un confinamiento que un juzgado ha acabado tumbando.
El embrollo de decisiones contradictorias anunciadas primero por el Govern y luego corregidas por la juez de guardia ha sumido la ciudad de Lérida en una suerte de desconcierto generalizado . La ciudad ha amanecido en un sopor marcado por el bochorno veraniego (casi 30 grados al sol) y la desorientación de estar en un vacío legal. El resultado son unas calles semi vacías, con casi todos los comercios y restaurantes cerrados . Solo en las inmediaciones de la Paería -ayuntamiento- había algo de ambiente poco antes del mediodía. La sensación generalizada, de incertidumbre.
«Estoy un poco en contra de que confinen Lérida y Barcelona no, donde también hay casos. No quiero que confinen mi ciudad, creo que hay un poco de injusticia. No saben lo que quieren ni lo que hacen», explican a ABC Raquel y Neus, dos jóvenes vecinas del centro de la capital del Segriá mientras paseaban sus perros. Ellas, y varias decenas de vecinos, acudieron anoche a una manifestación convocada de urgencia en la ciudad para protestar contra el confinamiento anunciado por Torra. «Si confinan, que confinen todo» , resuelven.