El Círculo de Economía exige a Puigdemont no salirse de la legalidad
El foro empresarial muestra su preocupación por la vía unillateral del independentismo que lidera el presidente de la Generalitat
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha inaugurado esta tarde la 33 reunión del Círculo de Economía, un foro donde desde hace años los jefes del ejecutivo catalán ven como el influyente lobby les reprende por la deriva del proceso soberanista.
Esta tarde no ha sido menos, y Juan José Brugera, que se estrena como presidente del Círculo en las jornadas de Sitges (Barcelona), ha exigido a Puigdemont «respeto por el marco legal».
Tal y como ha expresado en sucesivas notas de opinión, el Círculo propugna una suerte de tercera vía reformista frente a la unilateralidad independentista y el «quietismo» del Gobierno, en expresión del anterior presidente del foro, Antón Costas.
No obstante, y a medida que los partidos independentistas han acelerado el paso y entrado por la senda rupturista, el tono del Círculo se ha endurecido, y esta tarde de manera clara, Brugera ha instado a Puigdemont ha «acomodar la acción de su gobierno al marco legal».
«¿Por qué no acudir al Congreso?»
No solo eso, Brugera ha cuestionado la decisión del presidente de la Generalitat de no aceptar la invitación del Gobierno de presentar su propuesta de referéndum en el Congreso. «Dado que se señala que el proceso catalán es primer problema político español, ¿por qué no acudir al Congreso a expresar el malestar catalán? No se trata de una o dos sesiones para dirimir si referéndum sí o no, si no abrir conversaciones con todo el arco parlamentario».
El presidente del Círculo, en esta línea, ha rogado al presidente catalán que insista en lo que para el foro es la única salida al «problema catalán»: «Diálogo, reforma y respeto al marco legal». Tres máximas que, ha recordado Brugera, y a tenor de los últimos acontecimientos, cobran mayor trascendencia, en una salida que el Círculo de Economía transmitirá el sábado al presidente Mariano Rajoy, encargado de cerrar las jornadas.
«Una dinámica de mantenimiento de las posiciones propias solo lleva al deterioro económico y social», ha insistido Brugera, que ha señalado su temor a que el empecinamiento en el proceso soberanista «trunque la recuperación económica».
